Los atentados han costado más de 23.000 millones en pago de seguros desde 1975
Además, las indemnizaciones por daños personales sobrepasaron los 2.000 millones de pesetas (12,02 millones de euros), aunque esa cifra sólo incluye los pagos realizados desde el año 1987, ya que el consorcio carece de datos precisos sobre los ejercicios anteriores.
Esta entidad pública indemniza por los daños materiales y personales que ocasionan acontecimientos extraordinarios, como una inundación, un terremoto, actos de terrorismo, tumultos populares o actuaciones de las Fuerzas Armadas o Cuerpos de Seguridad del Estado en tiempos de paz, siempre que estén protegidos por una póliza de seguros privada.
Los atentados terroristas supusieron cerca del 8% de los daños materiales causados por todos los acontecimientos extraordinarios en el último cuarto de siglo, que ascendieron a 266.881 millones de pesetas.
Los efectos del terrorismo son aún más patentes en el caso de los daños personales, ya que supusieron el 85,4% de las indemnizaciones abonadas por el consorcio a los damnificados físicamente. 'Siendo el terrorismo la causa fundamental de las cuantías pagadas en daños a las personas', asegura la entidad, 'se observa una alta concentración de siniestralidad en Madrid y en el País Vasco'. Este organismo ha tenido que pagar 660 millones en la Comunidad de Madrid desde 1987, el 32,2% del total abonado por daños personales, al tiempo que abonó 675 millones en Guipúzcoa y Vizcaya, el 32,9%.
La mayor cifra, en 1982
Los desembolsos más elevados realizados por el consorcio por daños materiales se produjeron en 1982, cuando tuvo que pagar 2.786 millones de pesetas. La semana anterior a las elecciones generales de ese año se intensificaron las acciones de ETA, que hizo explotar 21 bombas en Bilbao. Además, el 18 de abril de ese año, la organización terrorista hizo estallar una carga de 178 kilos de explosivos en el interior de la central de Telefónica en Madrid, que causó pérdidas materiales por más de 1.000 millones de pesetas.
El desembolso también fue muy elevado en 1987, cuando pagó 2.008 millones de pesetas por daños materiales y 160 millones por los personales. Ese año, ETA hizo estallar en el centro comercial Hipercor de Barcelona una bomba incendiaria compuesta por 30 kilos de amonal y 100 kilos de líquido inflamable. En el atentado murieron 21 personas, hubo 45 heridos y se produjeron cuantiosos daños materiales. La misma banda atentó también ese año con un coche bomba contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza. Hubo cinco muertos y 40 heridos.
Con todo, la segunda mayor cuantía abonada por el consorcio por daños materiales se produjo en 1997, ejercicio en el que pagó 2.165 millones y en el que, entre otros atentados, explotaron cuatro coches-bomba, cinco bombas-lapa y fueron asesinadas 13 personas.
En total, desde 1975, la entidad ha tenido que tramitar 19.976 expedientes por daños materiales derivados del terrorismo y ha abonado una media de 1,05 millones de pesetas en cada uno de ellos. Además, ha abierto 579 expedientes por daños personales ocasionados por actos terroristas desde 1987, el primer ejercicio del que se poseen datos, con una media de 3,5 millones de pesetas por expediente.
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