Aznar negociará el Concierto vasco sólo con el próximo Gobierno

La confrontación entre los Gobiernos central y vasco alcanzó ayer su máxima expresión al afectar a la institución más importante de la autonomía vasca, el Concierto Económico. Tras una serie de declaraciones contradictorias de distintos portavoces del Gobierno central, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, despejó ayer la posición definitiva del Ejecutivo central sobre la negociación del Concierto vasco con el del lehendakari Juan José Ibarretxe, al aclarar que no se iniciará hasta que se constituya un nuevo Ejecutivo vasco, tras las próximas elecciones autonómicas.

Conocida la posición definitiva del Gobierno central, el portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Jon Imaz, le desafió con el anuncio de que le transmitirá formalmente su voluntad de que reúna a la Comisión Mixta de Cupo para abrir formalmente las negociaciones. La renovación de esta ley, la más importante de la autonomía vasca, que caduca este año, tras veinte años de vigencia, es el reto más importante de la gestión del Gabinete vasco. El rechazo definitivo de Montoro a abrir esta negociación con Ibarretxe originó la irritación de su portavoz, Imaz, y la petición de dimisión del ministro de Hacienda.

El portavoz del Gobierno vasco recordó que la posición que ayer expresó el titular de Hacienda es contradictoria con la que manifestó el vicepresidente económico, Rodrigo Rato, en su visita la pasada semana a Vitoria. Rato afirmó que había que salvaguardar las relaciones institucionales del conflicto político entre ambos Ejecutivos y no puso obstáculos a la apertura de negociaciones con el Gobierno de Ibarretxe.

El viernes, tras el Consejo de Ministros, el portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, advirtió de que se iniciaría la negociación, una vez avanzada la de la financiación común, que aún no ha comenzado. Ayer, el titular de Hacienda ya aclaró que no habría negociación con el Gobierno de Ibarretxe. Imaz está convencido de que el Gobierno central utiliza el Concierto Económico como arma de presión para que Ibarretxe adelante las elecciones.