El Pérez de Guzmán

Leo con estupor la noticia aparecida en la sección Aulas que se titula 'Profesores del Instituto Pérez de Guzmán de Ronda denuncian un rechazo social al centro', por lo que se refiere al análisis de la situación atribuido, parece ser sin fundamento, al señor delegado provincial de Educación de Málaga ... 'ante este grupo de alumnos con una situación social y económica desfavorable, los docentes del Pérez de Guzmán han manifestado un rechazo a hacerse cargo de esa realidad y a volcarse en su tratamiento...'

Yo fui alumna de este centro y durante el curso 1999-2000, profesora del Departamento de Geografía e Historia; este año he permanecido en él hasta el 15 de noviembre en esa nueva situación creada por el Pacto de Estabilidad de los interinos, denominado Centro de Referencia.

Puedo hacer constar mi experiencia y la de mis compañeros, muchos de ellos 'volcados' (utilizo el mismo vocablo de la crítica) en su trabajo, poniendo en práctica cada día adaptaciones curriculares que permitan llegar a unos alumnos que arrastran deficiencias significativas en materias instrumentales básicas (lectura, escritura y cálculo).

He podido observar, asimismo, la actitud general de los compañeros ante situaciones de necesidad, atendiendo a alumnos enfermos o accidentados, preocupados en prestarles las debidas atenciones, con respeto y en diversas circunstancias con cariño. Algún compañero, ante el hecho de que los padres convocados al centro para tratar la problemática de sus hijos no han acudido, ha ido personalmente a la propia casa de los alumnos a hablar de los temas.

Se creó un Grupo de Trabajo en el CEP de Ronda expresamente para elaborar materiales curriculares adaptados a las necesidades de los alumnos del primer ciclo de la ESO.

Yo misma he sufrido la impotencia de no poder permanecer este año en mi Centro de Referencia, trabajando con el Equipo de Orientación en servir de apoyo y elaborar materiales didácticos adaptados a las necesidades de estos alumnos, a pesar de que esta tarea es la que la Consejería de Educación había previsto para esta situación, llegando incluso a decir en la prensa a principios de octubre que habían dotado a los centros de mayores recursos humanos en los Departamentos de Orientación. La realidad no se corresponde con esta afirmación y lo que sí se ha podido comprobar es el aumento del número de alumnos por clase: más de 30 en grupos de alumnos inadaptados.

Seguimos haciendo nuestro trabajo de la mejor manera que sabemos, a pesar de que parte del colectivo no hemos percibido nuestro salario de los dos últimos meses. Demandamos que en centros con esta problemática se cuente con los recursos humanos y económicos necesarios para poder generar una transformación educativa y social de su entorno.-