De la Torre se asegura liquidez al aplazar 24.981 millones de deuda
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Málaga, del PP, se ha asegurado cierto margen de maniobra para evitar un drástico recorte de inversiones y gasto corriente en los próximos ejercicios presupuestarios tras alcanzar un acuerdo con distintas entidades bancarias para diferir en 30 años el pago de 24.981 millones de pesetas de deuda. La oposición ha criticado la operación porque "hipoteca a la futuras generaciones de malagueños".
El alcalde, Francisco de la Torre, reconoció que el acuerdo beneficia a los malagueños "de ahora" y permitirá a la corporación que él preside "disponer de más dinero para inversiones y para sostener las políticas sociales y culturales". En los próximos años, el Ayuntamiento debía hacer frente a pagos de amortización de deuda de entre 1.500 y 2.000 millones cada ejercicio, aportaciones que se reducirám a casi una décima parte en los años inmediatos, ya que hasta el año 2010 no habrá que hacer frente al principal, según reconoció el concejal de Hacienda, Francisco Aguilar. El coste total de la amortización de la operación de refinanciación supondrá sin embargo casi 20.000 millones de pesetas a repartir en los 30 años de vigencia de los créditos. Los créditos han sido negociados después de que el Ministerio de Hacienda no se haya pronunciado sobre la solicitud que le hizo el Ayuntamiento de realizar una emisión de deuda pública por 8.000 millones de pesetas. Aguilar reconoció ayer que, pese a no ser denegada, "ya no es tiempo de hacerla". La oposición criticó ayer el fracaso de esta operación, con la que Aguilar señaló en su día que el Ayuntamiento ganaría credibilidad ante las entidades financieras, y la calificó de un "nuevo fiasco del PP".
De la Torre firmó ayer dos préstamos con el Banco de Crédito Local, ambos por 30 años y con uno de carencia. Uno, por 10.206 millones de pesetas, a un interés fijo del 6,14% anual; y el otro, por 8.643 millones al tipo del Euribor más un 0,5%. Hoy se firmarán otros préstamos que suman 6.132 millones de pesetas con el Banco Santander Central Hispano (3.422 millones), el Banco Bilbao Vizcaya (1.500 millones) y Cajamadrid (1.210 millones).
El portavoz de IU, Rafael Rodríguez, consideró "irresponsable" la refinanciación porque "las generaciones futuras tendrán que pagar la falta de planificación del PP". Igualmente, el portavoz del PSOE, Francisco Oliva, las tachó de "absolutamente insolidarias" y ctiticó que al mismo tiempo se aumente la deuda, se refinancie y se suban los impuestos. "En tiempo de bonanza hay que pagar y guardar el equilibrio", sentenció.
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