El pueblo quiere una solución ya

El pueblo estadounidense desea que la palabra del Tribunal Supremo de EE UU sea la última, y confía en que será justa. Casi tan exhausta como los abogados, los políticos y los periodistas, la opinión pública pide que la batalla termine antes de Navidad. La mayoría acepta a Bush como vencedor.El 61% prefiere que sea el Supremo de EE UU el que zanje el asunto, según la encuesta difundida ayer por CNN-USA Today-Gallup. Tan sólo el 17% quiere que el árbitro sea el Congreso de EE UU y porcentajes aún más pequeños (el 9% y el 7%) prefieren que sean el Supremo o el Legislativo de Florida. A la pregunta de si los magistrados de Washington sentenciarán de modo justo, el 72% responde de modo afirmativo y el 17% de modo negativo. Aunque también el 51% frente al 42% se declara consciente de que las opiniones políticas de los jueces influirán en su decisión.

Hay ganas de terminar. El 75% de los encuestados cree que Bush será el ganador en el Supremo de EE UU, frente al 14% que apuesta por Gore. Un 53% frente a un 43% cree que Gore debería darse por derrotado antes de una sentencia contraria a sus tesis de una mayoría de los jueces de Washington. Si se produce esa sentencia, el 79% frente al 16% le pide que arroje la toalla.

El argumento con el que Gore sostuvo popularmente su posición en las primeras semanas del pulso poselectoral -la necesidad de escrutar todos los votos de Florida- pierde gas. El 49% de los encuestados por CNN opina que el Supremo de EE UU debería prohibir la continuidad del recuento manual. El 47% deseaba que ordenara culminar ese recuento.