Aznar y Zapatero coinciden en abrir el pacto contra ETA al PNV si cambia de rumbo

El presidente del Gobierno, José María Aznar, y el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, coincidieron ayer en que el pacto contra ETA y sobre Euskadi está abierto a que lo firme también el PNV siempre que los nacionalistas vascos rectifiquen sus postulados soberanistas formalizados en el Pacto de Lizarra. Zapatero y Aznar coincidieron también en que el acuerdo está sólo pendiente de algunas "cuestiones de redacción". La Cumbre Europea de Niza, a la que acudieron ayer ambos líderes, aplaza la firma del pacto hasta la próxima semana. Aznar apuntó el día 12 como posible.

Aznar y Rodríguez Zapatero ratificaron ayer públicamente en declaraciones efectuadas en el Congreso, tras el acto de conmemoración del 22º aniversario de la Constitución, el principio de acuerdo en las conversaciones entre las delegaciones del Gobierno y el PSOE para lograr un pacto contra ETA y sobre la situación del País Vasco. Las delegaciones continuaron ayer la redacción del texto común, de cinco folios, y con tres partes: los principios del pacto, los objetivos y su metodología. El presidente del Ejecutivo aprovechó la jornada conmemorativa de la Constitución para solemnizar la importancia del pacto antiterrorista con el PSOE. "Espero y deseo que se suscriba un acuerdo, con un compromiso muy claro, como una expresión de esperanza, porque millones de personas y cientos de miles en el País Vasco coinciden en que la España deseable y posible es la constitucional". A su vez, Rodríguez Zapatero resaltó que lo importante del pacto es que "se convierta en un arma poderosísima contra el terror y la violencia".

El principio de acuerdo, alcanzado la víspera entre los negociadores del Gobierno, Javier Zarzalejos, y del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, vincula la lucha antiterrorista con la situación política del País Vasco y, en consecuencia, condiciona la adhesión del PNV al mismo a la rectificación de su orientación actual del Pacto de Lizarra. La base del acuerdo elude, a su vez, cualquier compromiso electoral previo y posterior a la celebración de las elecciones vascas entre el PP y el Partido Socialista de Euskadi (PSE).

Aznar expresó la importancia del compromiso de principios contraído con el PSOE, porque vincula "la lucha antiterrorista con el cambio de rumbo en la política vasca", como viene reclamando desde hace meses.

Pero, sobre todo, insistió en la importancia de que el acuerdo exija al PNV ese cambio de rumbo en la orientación de su actual dirección favorable a las tesis independentistas. Y abra la posibilidad de que los numerosos sectores autonomistas del nacionalismo vasco -vinculados a la dirección vizcaína del PNV y a los cargos institucionales- se incorporen al mismo. "En el cambio de rumbo político determinante que se reclama en el País Vasco caben muchos, como los miembros del PNV que no están de acuerdo con la estrategia de sus actuales dirigentes", señaló ayer Aznar.

En un llamamiento a estos sectores, les animó a que "recuperen su trayectoria histórica y su respeto a las instituciones autonómicas con unos mínimos imprescindibles, como son la ruptura del Pacto de Lizarra y su estrategia de acuerdos", en alusión a Udalbiltza (Asamblea de Electos Municipaless Vascos), acordada con EH.

Fuentes próximas al secretario general del PSOE resaltaron, en coincidencia con Aznar, la exigencia al PNV para que rectifique. Pero también expresaron su satisfacción porque el acuerdo de base con el Gobierno no aluda para nada a compromisos electorales en Euskadi, tal y como pretendía el PSOE en el momento de abordar con el Ejecutivo la negociación del pacto contra ETA y sobre el País Vasco.

Tanto Aznar como Rodríguez Zapatero apuntaron que "sólo quedan algunos flecos" pendientes de resolver. Fuentes próximas a Rodríguez Zapatero precisaron: "Quizás el único matiz pendiente de resolver se refiere a cuántas ganas tenemos cada uno de nosotros de que el PNV se acerque al bloque de partidos constitucionalistas".

Las declaraciones de Aznar y Rodríguez Zapatero confirmaron que aún queda por resolver en la negociación quién firmará el pacto, aunque todo apunta a que los protagonistas serán ambos. El pacto será "simétrico", esto es, entre partidos: el PP y el PSOE y, posteriormente, se abrirá a otras fuerzas políticas.

Compromiso político

Aznar señaló que "lo importante es el compromiso político". Y Rodríguez Zapatero aclaró: "No me importa la foto. Lo importante es que el compromiso quede por escrito". No obstante, avisó: "Depende de quién firme por parte del PP se podrá medir la importancia que concede al acuerdo".En cuanto a la fecha de la firma, será la próxima semana, ya que Aznar asiste a la cumbre europea de Niza durante el fin de semana. Aznar dejó caer como posible la fecha del próximo martes, 12 de diciembre. "Lo determinante es el compromiso político. Me da igual si la fecha es el 6 de diciembre o el 12".

El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, manifestó ayer que su formación no está dispuesta a que el PP y el PSOE firmen un pacto contra el terrorismo y después llamen a la coalición "para aceptar sin más sus mandatos políticos".

Por su parte, el presidente de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol, calificó de "error" el intento del PP de entablar diálogo con sectores del PNV que sean más próximos a las tesis que se defienden desde el Gobierno. "En el País Vasco se tendrá que hablar con mucha gente y no sólo con el PNV", y explicitó que no se puede dejar fuera de este diálogo ni a la dirección del PNV ni a su máximo representante, Xabier Arzalluz. "El PNV es el PNV. Puede tener una escisión, puede tener su sector crítico, pero es el PNV. Es como si yo le dijera que quiero hablar con el PP, pero sólo con aquellos que realmente son partidarios de hacer una lectura muy autonomista de la Constitución y no la más restrictiva. No me serviría de nada. Hay que hablar con el PP y, por supuesto, con Aznar, que es el jefe del partido".