Consenso con Rusia para los rescates como el del 'Kursk'
Rusia no ha modificado ni un ápice su total oposición al proyecto de escudo antimisiles estadounidense, aparcado por Bill Clinton, pero que George Bush tiene intención de poner en marcha si finalmente llega a la Casa Blanca. "Nuestra postura es la misma de siempre. Supone una violación al tratado de misiles antibalísticos (ABM) y abriría la puerta a una nueva carrera de armamentos", dijo anoche en Bruselas el ministro de Defensa ruso, Ígor Sergueyev.El mariscal Sergueyev participó en la reunión de trabajo del Consejo Permanente OTAN-Rusia, que fue copresidido, además de por el secretario general de la Alianza Atlántica, George Robertson, por el ministro Federico Trillo. "La colaboración en Kosovo es un ejemplo de cómo las dos partes pueden trabajar juntas", manifestó Trillo.
La reunión sirvió para acordar un programa de trabajo sobre operaciones de búsqueda y rescate en el mar con el fin de evitar tragedias como la del submarino nuclear Kursk. Moscú afirmó en su día que la catástrofe fue causada por una colisión con un sumergible estadounidense o británico, extremo desmentido por Washington y Londres.
Los ministros aliados abordaron en su reunión de la mañana la situación en los Balcanes. De momento no está prevista una reducción de efectivos (40.000 soldados en Kosovo y 20.000 en Bosnia-Herzegovina). No se descarta una revisión en el próximo semestre en función de la evolución en Bosnia y lo que deparen las elecciones legislativas del próximo día 23 en Serbia.
Por otra parte, España, Francia, Italia y Holanda firmaron ayer una declaración de intenciones para intensificar la capacidad anfibia europea. El objetivo de la iniciativa, según el documento suscrito por los ministros de Defensa de los cuatro países, es crear mayor cooperación y mejorar la operatividad entre las fuerzas existentes.
