Un cambio muy discutible

Jueces y expertos en Derecho Penal creen que las reformas antiterroristas se hacen "a golpe de telediario"

Penalistas de prestigio, jueces y magistrados vascos y del resto de España, así como expertos procedentes de distintos ámbitos del mundo académico han coincidido en sus censuras desde diferentes puntos de vista a las reformas en materia antiterrorista que el Gobierno central quiere introducir en el Código Penal y en la Ley Penal del Menor. Además de subrayar la intensificación del carácter punitivo frente al reeducador que suponen las propuestas de modificación, los expertos entienden que en los últimos años las reformas legales en esta materia se vienen realizando "a golpe de telediario".Las críticas han surgido en el marco de un seminario sobre estos cambios legales que se ha desarrollado durante esta semana en la academia de la Ertzaintza en Arkaute, convocado por el Departamento de Interior.

La que actualmente se está tramitando en el Congreso de los Diputados es la séptima reforma parcial del Código Penal desde que el Gobierno socialista aprobó el último gran cambio del mismo en 1995, con Juan Alberto Belloch en la supercartera de Justicia e Interior. Mientras, la Ley Penal del Menor ha sufrido dos modificaciones durante su periodo de vacatio legis, es decir, antes incluso de que entre en vigor, lo que se producirá el próximo 13 de enero.

En esta ocasión, el objeto de los cambios en ambos textos pretende ajustar y matizar legalmente comportamientos relacionados con la lucha antiterrorista, tanto en el ámbito de la legitimación externa de los grupos armados -apología del terrorismo-, como en la participación de los menores en actos de la kale borroka o el acoso a cargos locales de los partidos democráticos.

La idea compartida por la mayor parte de los expertos que han intervenido en el seminario de Arkaute la resumió el fiscal jefe de Vitoria, Alfonso Aya, cuando señaló que "una ley elaborada tras importantes estudios de juristas no puede cambiarse de la noche a la mañana en los pasillos del Congreso en función de la actualidad", en referencia a la Ley Penal del Menor.

Carlos Suárez, catedrático de Derecho Penal y responsable de Centro Internacional de Investigación sobre la Delincuencia, entiende que la intención inicial reeducadora que inspiró la legislación se ha truncado parcialmente por la reforma impulsada desde el Gobierno del Partido Popular. "Modificar una ley antes de que entre en vigor y sin ver el juego que puede dar no es un procedimiento deseable, ya que la ley del Menor, tras el Código Penal es una de las leyes más relevantes", manifestó.

La reforma pactada en la Comisión de Justicia del Congreso entre populares y socialistas ha suavizado en parte el endurecimiento que pretendía establecer el Ejecutivo de José María Aznar en su proyecto incial. El texto acordado reduce de diez a cinco años el tiempo máximo de internamiento para los menores de entre 14 y 16 años que cometan delitos de terrorismo callejero frente a los diez años que proponía el texto del Gobierno. El máximo de 10 años de internamiento para los menores de entre 16 y 18 años se ha mantenido, aunque introduciendo criterios de proporcionalidad que había demandado la oposición.

El consejero de Interior, Javier Balza, destacó en su intervención en el cónclave que se está atendiendo en este caso a "clamores sociales a falta de un soporte estadístico para fundamentar la reforma". De su lado, el juez decano de la Audiencia donostiarra, Iñaki Subijana, interpreta que los cambios que se tramitan "ponen en cuestión los principios que inspiraron la ley del Menor", como son el componente educativo y el aspecto reparador.

También el magistrado de la Sala Segunda del Supremo Joaquín Giménez, buen conocedor de la situación del País Vasco tras presidir sucesivamente las audiencias provinciales de San Sebastián y Bilbao, considera que debería respetarse el espíritu inicial de la ley, que evitaba "estigmatizar a los menores de por vida".

El ambiente que se respira entre los jueces y magistrados vascos ante las perspectivas de la modificación legal no es optimista. Jaime Tapia, juez de menores de Vitoria, no oculta su decepción: "Se está descafeinando el texto original, y lo que podía haber supuesto un avance de veinte pasos en la modernización de esta parcela legal se va a quedar en la mitad".