El PP ofrece la Casa de Campo para las reuniones masivas de ecuatorianos

Los miles de ecuatorianos que desde hace tres años se reúnen los jueves, sábados y domingos en el parque del Oeste (Moncloa) a jugar al voleibol, merendar y escuchar música tendrán que trasladarse a unas zonas aún sin concretar de la Casa de Campo y el parque de Tierno Galván. El Ayuntamiento de Madrid ofreció ayer estas ubicaciones alternativas a la Coordinadora Nacional de Ecuatorianos en España, porque considera que el parque del Oeste, una histórica zona verde con fuerte protección medioambiental, no es el lugar adecuado para estas aglomeraciones.Los nuevos espacios contarán con retretes portátiles y uno o varios quioscos donde los inmigrantes, una vez que saquen los permisos pertinentes, puedan vender bebidas y comidas típicas de su tierra. De esta manera se pretende evitar la acumulación de basura y también costumbres como la de cocinar los alimentos en el propio parque, que comportan riesgo de incendios y contravienen la normativa municipal.

La concejal de Moncloa, Dolores Navarro, explica que estas reuniones multitudinarias junto al paseo de Camoens estaban degradando el parque del Oeste. "Es una zona con muchas praderas que no soporta bien la presencia de miles de personas jugando partidos, comiendo y bebiendo", asegura. Desde el verano, agentes de la Policía Municipal acudían a la zona a decomisar alimentos.

La propuesta municipal ha sido bien recibida por los inmigrantes, aunque su opinión definitiva no la darán hasta ver la ubicación exacta elegida. Sus condiciones son que el lugar esté cerca del metro y los autobuses, que disponga de servicios sanitarios y que en ella puedan seguir vendiendo, aunque en buenas condiciones, platos de su tierra, como el hornado de cerdo o el yaguarlocro.

Guillermo Imbaquingo, presidente de la coordinadora, explica que los 80 vendedores de comida y bebida del parque podrían formar una cooperativa para regentar los quioscos que se instalen. "Estamos dispuestos a sacarnos el carné de manipulador de alimentos y a darnos de alta como autónomos", afirma.

Imbaquingo recalca la importancia que estos espacios de encuentro tienen para unas personas que viven a miles de kilómetros de su tierra. Los 46.000 ecuatorianos censados forman la mayor colonia de inmigrantes del municipio de Madrid.