La policía anuncia un plan piloto en 10 ciudades contra las mafias locales

La Dirección General de la Policía pretende poner en marcha el 1 de enero un plan piloto en 10 grandes ciudades para combatir de forma específica la delincuencia organizada. Más de 200 mandos de las brigadas de Policía Judicial y de Documentación y Extranjería están trabajando mañana y tarde para que el plan esté completamente cerrado y listo el 15 de diciembre, según fuentes policiales. Las redes de falsificación de documentos utilizadas por las mafias de tráfico de inmigrantes serán un objetivo prioritario.

El plan piloto está en fase de diseño y es una reforma más de las planteadas con el Plan Policía 2000, que se inició con el mandato de Juan Cotino en la Dirección General de la Policía y que ha levantado ampollas entre los sindicatos policiales. El objetivo del nuevo paso es la lucha contra la delincuencia organizada, contra los grupos estructurados de delincuentes que operan en las principales ciudades, tengan o no conexiones internacionales.Más de 200 responsables policiales están manteniendo reuniones diarias, en sesiones de mañana y tarde, desde que comenzó el mes para definir el plan contra las mafias locales, a fin de que el 15 de diciembre estén acotados los 10 delitos a perseguir, los efectivos con los que se va a contar y las ciudades en las que se aplicará el plan piloto desde el 1 de enero. El borrador del plan fue analizado el viernes por la Junta de Gobierno de la Dirección General de la Policía.

En principio, las ciudades y provincias que entrarán en el plan son Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Málaga y Alicante, a las que se sumarán los territorios de Baleares y Canarias. "Ésos son los territorios en los que en principio se desarrollará el plan piloto, porque también es donde más grupos organizados trabajan, pero aún falta por cerrar qué diez ciudades serán, aunque hay quien opina que deberían ser 12 ciudades", según fuentes que participan en esas reuniones.

Los diez tipos de mafia que se van a combatir de manera específica son las que se dedican a los los llamados alunizajes (estrellar coches en escaparates de joyerías para robarlas), atracos de joyerías y representantes, falsificación de documentos, tráfico de drogas y sustracción de vehículos de lujo para la exportación. "El plan está centrado en los asuntos de droga e inmigración", indicaron las citadas fuentes.

Una de las prioridades, según ha anunciado Cotino, será la "reforma de la Comisaría General de Documentación y Extranjería para potenciar la lucha contra las redes de falsificación de documentos, ya que estos grupos son aprovechados por cualquier organización de tráfico de personas". Para ello ya se están dando cursillos a los policías destinados a Extranjería para mejorar su preparación en la detección de documentos falsos e investigación de redes de falsificadores.

El proyecto, según Cotino, forma parte de la filosofía de "cambio permanente" que pretende implantar en el cuerpo para adaptarse a las demandas de la ciudadanía y del Estado. "Cuando nos planteamos qué había que hacer para mejorar la eficacia policial, pensamos que había tres opciones: dejarlo todo como estaba, cambiarlo todo o introducir un cambio permanente. Optamos por lo último", asegura Cotino.

La primera experiencia fue la creación de la llamada policía de proximidad o policía de barrio, que supuso un cambio en los hábitos de trabajo de las comisarías locales y de distrito. El siguiente paso fue la puesta en marcha en seis grandes ciudades (Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Málaga y Alicante) de un plan para combatir lo que se consideran delitos menores, pero que incomodan especialmente al ciudadano: robo en interior de vehículos, sustracción de coches, tirones, robo con violencia e intimidación y robo con fuerza en inmuebles.

"Empezamos con una experiencia en seis ciudades donde el pequeño delito era repetitivo, donde esos delitos suponían el 80% de todos los que se cometían", subraya Cotino. Los informes policiales indican que el plan ha permitido reducirlos en una media del 8,60% (de los 251.350 cometidos en el primer semestre de 1999 se ha pasado a 229.735 en el mismo periodo de 2000).

Un documento de la Secretaría de Estado de Seguridad precisa que en la demarcación de policía disminuyeron hasta marzo pasado en un 5,2% las infracciones penales conocidas, frente al aumento del 8,32% en territorio Guardia Civil y del 4,94% en el País Vasco, bajo jurisdicción de la Ertzaintza.