Bloqueo comunitario a la propuesta sobre el azúcar

Los principales países productores de azúcar de la Unión Europea, entre los que se halla España, han bloqueado la propuesta para la reforma de la Organización Común de Mercado para este sector presentada hace unas semanas por la Comisión de la Unión Europea. Se espera que adopten la misma actitud tanto el Consejo Económico y Social como el Parlamento Europeo, por lo que la propuesta deberá ser devuelta a la Comisión. La nueva reforma para el sector del azúcar deberá estar en vigor en julio de 2001, pero su aprobación tiene que producirse antes del 31 de diciembre de este año.

Bruselas, según todos los indicios, bajo la presión de los grandes grupos productores de bebidas -grandes consumidores de azúcar- presentó una propuesta de reforma, con carácter provisional, de cara a una modificación más profunda en el futuro. Frente a una Organización Común de Mercado vigente para cinco años, la Comisión propone que la pròxima sea solamente para un periodo de dos años para debatir en ese periodo una reforma más en profundidad. En medios del sector se teme la presión de los grandes grupos multinacionales de bebidas para reclamar unos precios para el azúcar en la UE iguales a los de los mercados internacionales. En la actualidad, los precios de intervención para el azúcar comunitario sujeto a cuota es de 110 pesetas kilo, mientras los precios en el mercado internacional, donde se colocan los excedentes de los países productores, asciende a sólo unas 60 pesetas kilo.

Equiparar precios del mercado interior con los del exterior supondría la necesidad de compensar a los productores por esa diferencia con una ayuda directa, algo que se está haciendo parcialmente con las producciones de herbáceos y que parece que no podría asumir en este momento un presupuesto comunitario restrictivo.

La propuesta comunitaria contempla, entre otros puntos, la eliminación de las ayudas para el almacenamiento, así como una congelación de los precios durante ese periodo. A la vista de la situación excedentaria de la UE en la producción de azúcar, la Comisión plantea igualmente una rebaja de cuotas que, en el caso de España, se concreta en un recorte de 3.000 toneladas. España se opone a la reducción que plantea Bruselas en su propuesta y reclama un incremento de su cuota en unas 60.000 toneladas. Esta cantidad sería el consumo correspondiente a Canarias, cuya demanda no se computó al ingresar en la UE.