¿Altruismo?
El pasado día 9 de noviembre, tras presenciar en televisión un llamamiento urgente solicitando determinados tipos de sangre y leyendo posteriormente en el teletexto de TVE al director gerente del Centro Nacional de Donaciones sus manifestaciones de que los madrileños deberíamos ser más altruistas, me dirigí al hospital más cercano a mi domicilio (el Doce de Octubre) para proceder a donar sangre. Cuál no fue mi sorpresa cuando al llegar al servicio de donaciones de dicho hospital me lo encuentro cerrado.Tras dirigirme a información y preguntar, la señorita de la ventanilla me comunica que ese servicio permanece cerrado los domingos y festivos.
Y digo yo, ¿con qué poca vergüenza se puede llamar a los ciudadanos a ser altruistas cuando los organismos responsables y encargados de los servicios de donaciones son incapaces de dar las mínimas facilidades para realizar estas labores? Ante una necesidad tan urgente como la que hacía el llamamiento, las reservas del Centro Nacional apenas disponían de sangre de los tipos 0+, 0-, A+ y A-, ¿es tan difícil montar un dispositivo que permita realizar donaciones en todos los hospitales de la Comunidad de Madrid? ¿Acaso las necesidades urgentes entienden de domingos y fiestas? ¿O es que económicamente no compensa mantener a unos profesionales de guardia en dichos servicios en caso de urgencia? Pues, señores, en este caso dejémonos de llamamientos sensacionalistas en televisión y dejemos que la gente sea altruista por propia iniciativa.
Bueno, yo, por si acaso, puse la pertinente reclamación, que, por supuesto, será respondida con amables palabras, pero... ¿servirá para algo?-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.