Muniategiandikoetxea recrea en su pintura el cine de Stanley Kubrick

Manu Muniategiandikoetxea (Bergara, 1966), uno de los tres ganadores este año del premio Gure Artea del Gobierno vasco, siempre ha recreado en su obra el trabajo de otros artistas, como la pintura de la rusa Liubov Popova o el alemán Martin Kippenberger. Ahora presenta en Windsor Kulturgintza (Juan de Ajuriaguerra, 14) de Bilbao los lienzos inspirados por la película 2001, una odisea en el espacio, de Stanley Kubrick. "No es falta de originalidad", dice. "Los artistas nos nutrimos de otros artistas".

Las obras de otros artistas han sido para Muniategiandikoetxea "el paisaje que rodea" a su pintura. "Yo creo que los artistas aprenden lo que es arte del trabajo de otros artistas. Es releer para tomar distancia y reconocerte a ti mismo. Convivimos con tantas imágenes que hacer algo original me parece pretencioso. ¿Que copio a otros? Bien ¿y qué?", se pregunta. "Lo importante es saber si lo hago bien o lo hago mal".La exposición que ha dedicado a la película de Kubrick es su primera muestra después de recibir el pasado octubre el reconocimiento del Gure Artea. Es un año de éxito para este licenciado en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco: Cajamadrid le ha concedido también el premio Generación 2000.

"Los premios sirven para que el nombre suene más; mueven tu obra y te hacen un catálogo maravilloso, pero no significa que luego la gente compre tus obras. Los coleccionistas piden firmas más hechas", decía ayer ante una galería repleta de los cuadros de la exposición Eguzki Begia. 2001, una odisea en el espacio, que ha pintado en tan sólo un par de meses.

Stanley Kubrick estrenó su filme antes de que Muniategiandikoetxea naciera. "Es una joya que nunca se hará vieja", dice entusiasmado. "Es una especie de homenaje a Kubrick a punto de entrar en el año 2001".

"El planteamiento de la película es muy plástico, está muy fragmentada, con momentos muy abstractos, que tienen más relación con la pintura que con el cine convencional", explica. Al retomar las imágenes del director se ha sentido más libre que en otras reinterpretaciones que había hecho anteriormente sobre los pioneros del cine y ha llevado a sus cuadros desde paisajes hasta las figuras humanas e imágenes abstractas.

A las pinturas sobre tabla y sobre tela que reflejan escenas reconocibles de 2001, una odisea en el espacio, como las que protagonizan los monos o las que representan las naves espaciales, se suman en la exposición una serie de impresiones digitales de menor formato, creadas a partir de fotogafías tomadas de la televisión y alteradas con el ordenador.

La exposición de Muniategiandikoetxea estará abierta al público hasta el próximo 10 de diciembre.