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El Gobierno comprará la desaladora que Gil hizo en Marbella sin financiación

Villalobos atribuye todos los retrasos en obras hidráulicas a Borrell y a la Junta

Ineficacia

El ministerio de Medio Ambiente recibió el viernes del Consejo de Ministros autorización para negociar la compra de la desaladora de Marbella, construida por un empeño personal de Jesús Gil cuando fue presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental y que nunca contó con instrumentos de financiación suficientes. Uno de los principales puntos de la negociación será aclarar el montante actual de la deuda, que con los intereses podría superar ya los 10.000 millones de pesetas.Esta obra fue realizada durante la anterior sequía, en 1996, y tiene capacidad para generar 22 hectómetros cúbicos de agua potable al año. Desde su construcción la planta se encuentra en desuso.

La decisión del Gobierno, que hasta ahora se había negado a asumir la desaladora como reivindicaban todos los grupos políticos, incluido el PP, fue anunciada ayer por la ministra de Sanidad, Celia Villalobos, en el acto de presentación del Plan Málaga, conjunto de obras hidráulicas para mejorar el abastecimiento humano y los regadíos en la provincia con un presupuesto global de 40.248 millones de pesetas.

El Consejo de Ministros aprobó el viernes el Plan Málaga, 10 meses después de que la entonces ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, lo presentara en público y anunciara el inminente inicio de las obras. Ahora en cambio se ha anunciado que las primeras actuaciones no comenzarán hasta el próximo año -ayer se firmó el convenio entre la Dirección General de Aguas y la sociedad pública Acusur, encargada de ejecutar el plan- y que el primer proyecto, una planta desalobradora en la capital y otras actuaciones complementarias para aprovechar los recursos del bajo Guadalhorce, estará concluido el 30 de marzo de 2002. La previsión que Tocino anunció en enero establecía que sería en diciembre de este año.

Según el nuevo calendario, todas las actuaciones estarán concluidas en cinco años. Las actuaciones permitirán aumentar en 226 hectómetros cúbicos adicionales la capacidad actual de los embalses de suministro de agua potable en la provincia. Las más destacadas son el recrecimiento del embalse de La Concepción, una nueva presa en Cerro Blanco, y la desalinización del pantano del Guadalhorce.

La ministra dedicó buena parte de su conferencia de prensa a criticar al anterior Gobierno socialista, a la Junta y a los ayuntamientos. No esperó a preguntas, desde el inicio de su intervención, Villalobos, en lugar de relatar las actuaciones que iba a presentar, recordó la "ineficacia" del ex ministro de Obras Públicas socialista Josep Borrell de quien dijo que cuando ella accedió a la alcaldía en 1995 tenía todas las obras hidráulicas paralizadas sin motivo.Villalobos arremetió contra la Junta, a la que tachó de "ineficiente e ineficaz" porque dijo que siempre tiene que devolver parte de los fondos de cohesión que le corresponden porque no ejecuta los proyectos. A propósito de los retrasos en el plan de saneamiento acusó a los ayuntamientos de no colaborar por no poner el suelo necesario. La ministra atribuyó a Aznar el éxito de haber declarado de interés general del Estado estas obras para que fueran realizadas por el Gobierno y olvidó que tal declaración se produjo en febrero de 1995, un año antes de que el PP llegara al Gobierno.

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