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Aznar descalifica la relectura de la Constitución que pide Pujol y el federalismo de Maragall

Enric Company

Ni relectura de la Constitución ni federalismo. El presidente del Gobierno, José María Aznar, descalificó ayer por igual las propuestas de Jordi Pujol y de Pasqual Maragall para el desarrollo del modelo autonómico. Calificó de "aprendices de brujo" a quienes promueven, dijo, "aventuras que afectan a las instituciones fundamentales", con propuestas de federalismo asimétrico y relecturas de la Constitución. El presidente advirtió tambien de que, de seguir cualquiera de estas dos vías, se pondría en riesgo la continuidad del desarrollo económico logrado por España en los últimos decenios.

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Aznar escogió un auditorio muy sensible a las repercusiones de la estabilidad política en la economía para lanzar su advertencia contra las propuestas de nacionalistas y socialistas catalanes. Habló ante más de mil asistentes a la jornada anual de ex alumnos de ESADE, la escuela de formación de directivos de empresa de los jesuitas, que llenaban el auditorio del Palacio de Congresos de Cataluña. A todos ellos les dirigió el presidente un mensaje muy claro. Se debería ser consciente, particularmente en Cataluña, afirmó, de que "las aventuras y los caminos sin destino conocido, cuando afectan a las normas y a las instituciones fundamentales, tienen efectos demoledores en la realidad económica y social". Y precisó que cuando oye "manejar alegremente términos como federalismo o asimetría" o ve "propuestas para leer la Constitución, no con arreglo a lo que dice, sino a lo que a algunos les gustaría que dijera", no puede evitar "acordarse de aquel aprendiz de brujo que inició los conjuros sin saber lo que se iba a desatar a continuación".

El progreso económico al que tanto ha contribuido la estabilidad política saldría perjudicado, advirtió, de experiencias de este tipo. "Aquí no estamos en una película, sino en una sociedad muy compleja, cuyo bienestar, aunque está muy bien arraigado, no es indestructible".

Aznar separó en su discurso las alusiones a las propuestas de Pujol y Maragall para el desarrollo autonómico de las advertencias que lanzó contra los nacionalistas vascos que hablan de "superar el marco institucional" y propugnan "reformas de alcance indeterminado". Si se hace de forma pacífica, sólo hay que oponerles los muchos argumentos contrarios o los millones de votos que sostienen el orden constitucional, reconoció. Pero acto seguido sentenció que "más grave es sin duda cuando las voces trabajan al unísono con las pistolas o los coches bomba". En este caso, aseguró, "ningún Estado de derecho tiene otra cosa que oponer que la respuesta jurídica apropiada frente al crimen, la extorsión y el totalitarismo".

Antes de pronunciar su discurso Aznar entregó los premios de ESADE a Josep Ferrer Sala (Freixenet), Juan Soto Serrano (Hewlett Packard) y los hermanos Antonio, Enrique, José María y Mariano Puig (Grupo Puig).

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Jose Maria Tejederas Chacon

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