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El polizón togolés recurre la decisión de Interior de denegarle el asilo político

Maribel Marín Yarza

Basile Akoussan, el polizón de Togo, de 27 años, que el pasado domingo llegó a Pasajes a bordo del mercante Medusa, no ha encontrado el amparo de las autoridades españolas. El Ministerio de Interior denegó ayer el reexamen de petición de asilo político, que sin embargo apoya en un informe el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Akoussan interpuso ayer un recurso contencioso-administrativo contra esta decisión, lo que en la práctica le permite permanecer en España hasta que la Audiencia Nacional lo resuelva, según confirmó el abogado del Turno de Extranjería encargado del caso, Iñaki Almandoz. El súbdito togolés tuvo que permanecer hasta última hora de la tarde en el interior del buque panameño, que se encuentra atracado en el puerto de Pasajes desde el domingo. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía retrasaron su desembarco a la espera de conocer los resultados del chequeo médico, hasta cerciorarse de que no era portador de enfermedades como el ébola o la fiebre tropical. Sólo entonces, sobre las 17.30 horas, pudo pisar territorio español. La Cruz Roja se hizo cargo del joven y lo trasladó al centro de acogida municipal de San Sebastián.

El súbdito togolés llegó a Pasajes a bordo del carguero junto a otro joven ilegal de Costa de Marfil. Un tercero que les acompañó durante parte del viaje fue desembarcado en la escala que el Medusa hizo en Sagunto (Valencia), tras constatar que era menor de edad. El buque de bandera panameña partió el pasado 19 de diciembre de Costa de Marfil con 2.435 toneladas de madera. Fue en este puerto,donde al parecer embarcaron los tres polizones. La tripulación se percató de su presencia cinco días después.

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