El Gobierno central considera "viable" el impacto ambiental de la 'Y' vasca
El Departamento de Transportes, que dirige Álvaro Amann, recibió ayer una gran alegría del Gobierno central: Medio Ambiente considera "viable" el impacto ambiental previsto para los trabajos de la Y ferroviaria vasca, la mayor y más ambiciosa obra de ingeniería realizada este siglo en la comunidad autónoma. La aprobación ayer de la declaración de impacto ambiental, que preparaba desde hace casi dos años el Ministerio de Medio Ambiente, da vía libre al proyecto. El estudio considera asumibles las repercusiones que tendrá la obra en el entorno, pero incluye una serie de medidas correctoras para minimizar el impacto y favorecer la integración ferrocarril-ciudad. La resolución de Medio Ambiente, que será públicada próximamente en el Boletín Oficial del Estado, acepta determinadas alternativas de trazado propuestas por el Departamento de Transportes y por el Ministerio de Fomento, "siempre y cuando se sujeten a una serie de condiciones para adecuarse a su entorno". Según indicó un portavoz de la consejería, las recomendaciones propuestas no van a suponer ninguna modificación sustancial del plan que ya ha diseñado el Gobierno autónomo y que ahora deberá ir plasmándose en los proyectos constructivos correspondientes.
Fomento controlará las medidas propuestas para reducir el impacto ambiental
El Ministerio de Medio Ambiente da luz verde a la alternativa de Arkaute, en el recorrido del tren de velocidad alta por la Llanada Alavesa entre Vitoria y la localidad de Luko. Lo mismo ocurre con la alternativa Sur a su paso por el valle del río Oria, siempre y cuando se cumplan unas condiciones que faciliten la integración ferrocarril-ciudad. Además, el ministerio propone el soterramiento del trazado ferroviario a la altura de Ali, en las afueras de Vitoria, e incluye una serie de pautas para proteger y conservar los suelos, la vegetación, el sistema hidrológico, la calidad de las aguas, la fauna y el patrimonio histórico arqueológico, así como para prevenir el ruido en áreas habitadas y en zonas de interés medioambiental. Por otra parte, la Secretaría de Estado de Infraestructuras, dependiente del Ministerio de Fomento, redactará un programa de vigilancia y seguimiento de las medidas planteadas por Medio Ambiente. La declaración de impacto ambiental se suma al anuncio realizado antes del verano por el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, de destinar medio billón de pesetas a la Y vasca. Las dos decisiones suponen la reactivación del proyecto, el impulso definitivo a una obra que comunicará las tres capitales a 200 kilómetros por hora. La previsión es que todos los trabajos concluyan en 2010.
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