Educación duda de la viabilidad de seis carreras con sólo cinco alumnos

En Andalucía hay seis carreras con sólo cinco alumnos matriculados y otras tantas no sobrepasan los 15 estudiantes. Juan Torres, secretario general de Universidades de Andalucía, puso en duda ayer en Granada la "rentabilidad social" de esos estudios. El secretario de Universidades no quiso incluir en ese grupo de carreras, que serán objeto de un análisis especial que determine su viabilidad, a las licenciaturas minoritarias clásicas, como la filología semítica. Torres citó otros estudios en el que el número de licenciados por promoción es mínimo respecto a los que comenzaron el ciclo. "El éxito de un sistema universitario se mide por los resultados que proporciona y por el número de titulados que salen. A mí lo que me preocupa es la rentabilidad social de los estudios. Me preocupa, por ejemplo, que creemos nuevas titulaciones y los alumnos no vean a los catedráticos o no hagan las prácticas correspondientes y al final el resultado sea malo", dijo.

Torres se mostró respetuoso respecto a la autonomía de las universidades para planificar sus estudios, pero advirtió que está dispuesto a incluso discutir con cada Universidad andaluza la rentabilidad de sus enseñanzas propias. "Cuando a la Junta de Andalucía se le pide financiación para los cursos de verano sí entramos a valorar su rentabilidad, pero si es la Universidad la que los mantiene por su cuenta la responsabilidad es suya", dijo.

"Una cosa es la autonomía universitaria que siempre respetaremos", añadió, "y otra la financiación pública de las universidades, que tiene que responder a parámetros objetivos de rentabilidad", dijo.

El secretario de Universidad, que ayer presidió por primera vez la reunión del pleno del Consejo Escolar de Andalucía, explicó que en el curso próximo se autorizarán nuevas titulaciones pero aplicando "criterios de reequilibrio". "No queremos que ni un solo estudiante deje de cursar la carrera que quiera, aunque eso no quiere decir que vayamos a ponerle la facultad a la puerta de su casa (...). Es el momento de pensar en las universidades, y de establecer sus necesidades, como un sistema y no como una suma de localismos", dijo.