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UN MES DE FIESTA CULTURAL

El dolor acabó con la celebración

El acto fue suspendido al conocerse el atentado terrorista en Sevilla

Para las gentes de la escena, la fiesta de presentación del Festival de Otoño es uno de los actos más esperados, no tanto por lo que allí pueda suceder, que siempre está marcado por pequeños espectáculos y música en directo, sino porque es un punto de encuentro entre los profesionales del teatro, la música y la danza. Pero, como dijo anoche el presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, "hoy ETA ha vuelto a asesinar dando muestras de su macabra voluntad de introducirnos en un dolor tan profundo que lo hace incompatible con la celebración de una fiesta".La decisión de suspender el acto la tomó el Gobierno regional poco después de conocerse el atentado de Sevilla, pero ya era tarde para avisar a los convocados y éstos acudieron a cientos a las nueve de la noche, a la Puerta del Sol, donde Ruiz-Gallardón afirmó: "Ahora más que nunca el Festival de Otoño debe ser el festival de la cultura, que no es otra cosa que el lenguaje de la inteligencia, tan lejos del que utiliza ETA".

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Tras invitar a los asistentes que no había nada más que hacer que irse para sus casas, éstos se quedaron departiendo. Porque la fiesta, con música o sin ella, con equilibristas o sin ellos, con cokctail o sin él, es un momento de encuentro entre compañeros en el que se comparte dolor y lo que haga falta.

Caras conocidas, como Charo López, Esperanza Roy, Claudia Gravi, María Asquerino, Joaquín Hinojosa, Manuel de Blas, Charo Soriano, Maite Brick, María José Alfonso, José Luis Gómez o Socorro Anadón se iban yendo, pero poco a poco y al final la fiesta se convirtió en una gran tertulia en la que se despachaban asuntos de estado y asuntos del oficio.

Entre los que permanecieron estaba Alicia Moreno, consejera de Cultura de la Comunidad, y el recién estrenado director del Festival de Otoño, Ariel Goldenberg, que comentó tajante: "Cuando pasan estas cosas no hay nada que festejar". Goldenberg compagina su cargo con el de director del Teatro Chaillot, de París.

Alicia Moreno sigue muy de cerca la programación del Festival: "No puedo separar completamente la tarea política que me ha sido encomendada del placer que me produce trabajar en esta apuesta permanente por mostrar las artes".

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