La oposición amenaza con movilizar de nuevo la calle

Varios dirigentes de la Oposición Democrática de Serbia (DOS), que ganó las elecciones presidenciales el pasado 24 de septiembre, amenazaron ayer con nuevas movilizaciones populares en las calles si los partidarios del régimen del derrotado Slobodan Milosevic torpedean la transición hacia la democracia en Serbia. El portavoz de la DOS, Cedomir Jovanovic, emplazó hasta mañana, viernes, al Partido Socialista de Serbia (SPS), de Milosevic, a continuar las negociaciones para la formación de un nuevo Gobierno en Serbia. Si no se llega a la negociación, la DOS convocará de nuevo a la gente a la protesta. El coordinador de la campaña electoral de la DOS y dirigente del Partido Demócrata (DS), Zoran Djindjic, declaró que el problema reside en aceptar la elección para el Parlamento de Serbia. Djindjic asegura: "El país no funciona". A continuación advierte: "Si ellos no aceptan esas elecciones, invitaremos al pueblo a que las pida". Por su parte, Vladan Batic, otro de los líderes de la DOS, amenazó: "Si no quieren el Gobierno de transición, tendrán al pueblo en las calles".

Zarko Korac, dirigente de la minúscula Unión Socialdemócrata (SDU), se mostró contundente en sus declaraciones: "Advertimos seriamente a la opinión pública de Serbia de que saqueadores, impostores y violentos del SPS y de la JUL se preparan para la peligrosa aventura de intentar volver de forma ilegal al poder". Según Korac, en los últimos días Milosevic ha desplegado una enorme actividad política y ha mantenido "consultas incesantes con los responsables de los partidos políticos del antiguo régimen".

Otro dirigente de la DOS, el veterano político del Centro Democrático (DC) Dragoljub Micunovic, que el sábado pasado presidió por su condición de diputado de más edad la constitución de la Cámara de las Repúblicas, declaró ayer a la agencia Efe en Belgrado: "Si los socialistas continúan bloqueando la solución de esta crisis, se van a encontrar con la voluntad del pueblo, que quiere cambios y más cambios".

La DOS necesita la convocatoria, lo antes posible, de elecciones en Serbia. Sin el control del aparato de poder en la mayor de las repúblicas de Yugoslavia, el triunfo de Kostunica puede quedarse en agua de borrajas.

En Serbia, la DOS no tiene ningún poder en el Gobierno y ni un solo diputado en el Parlamento. En 1997, la actual DOS boicoteó las elecciones por considerar que no había garantías de limpieza.