_
_
_
_

Israel cree posible la convocatoria urgente de una cumbre para atajar la ola de violencia

Los grandes corredores de fondo de la diplomacia internacional tratan de colaborar con el presidente norteamericano, Bill Clinton, en la convocatoria urgente de una cumbre entre el líder palestino, Yasir Arafat, y el primer ministro israelí, Ehud Barak, antes de que sea demasiado tarde. El objetivo es celebrar la reunión en El Cairo en el plazo máximo de una semana, pero antes deberán resolverse las trabas y condiciones planteadas por cada una de las partes. Simón Peres, enviado especial de Barak, aseguró ayer en París que cree posible una cumbre e, incluso, una comisión de investigación.

Aunque el Gobierno israelí se ha negado hasta ahora a participar en una comisión de investigación internacional, Peres declaró ayer en París (donde se reunió con el presidente Jacques Chirac) que "la verdadera diferencia" es la "composición", informa France Presse. "Ahora, hay otra composición, tal vez bajo el liderazgo de la ONU", dijo el enviado de Barak, en referencia a la propuesta del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan. Peres aludió también a la formación de un posible Gobierno de unidad nacional en Israel.Otro paso adelante hacia la pacificación es la reunión del Comité Tripartito de Seguridad, anunciado anoche por Annan y en el que participarán los reponsables "al más alto nivel" de seguridad israelíes, palestinos y estadounidenses. Según Annan, la reunión tendrá lugar "lo antes posible", incluso hoy mismo. El Comité fue establecido por los acuerdos de Wye River, firmados en 1998 por Arafat y el entonces primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.

Colocar de nuevo frente a frente a Arafat y Barak es el objetivo principal de la Casa Blanca, que intenta con este encuentro calmar la situación y encarrilar el proceso de paz, en vía muerta desde finales de julio, y evitar que la violencia en los territorios autónomos acabe contagiando a los demás países árabes. Clinton está dispuesto a trasladarse a la región y reclama que sirva para apagar el fuego.

La diplomacia internacional considera que para que esta cumbre entre Arafat y Barak sea plenamente efectiva es necesario que se celebre antes de la reunión extraordinaria de la Liga Árabe, prevista para el 21 y 22 de octubre, y en la que los 22 países de la región podrían adoptar graves y drásticas medidas contra Israel y en favor del pueblo palestino. La única manera de desactivar esta amenaza, según los protagonistas, es consolidar un principio de acuerdo entre las dos partes en conflicto, Arafat y Barak, anular el protagonismo de la calle y trasladarlo de nuevo a la mesa de las negociaciones.

"No hay otra alternativa que la de ponerse a trabajar juntos", aseguraba Bill Clinton desde Washington tras haber mantenido una conversación con el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, que trabajaba ayer sobre el terreno para hacer posible el encuentro. El equipo diplomático internacional se completa con el representante de la UE, Javier Solana, en Egipto, Beirut, Damasco y Ammán, y el ministro ruso de Exteriores, Ígor Ivanov. El equipo ha quedado reforzado con el jefe de la diplomacia británica, Robin Cook, que llegó ayer tarde a Tel Aviv.

Israelíes y palestinos, de acuerdo en participar en la cumbre junto con Bill Clinton y el presidente egipcio, el anfitrión, Hosni Mubarak, reclaman una misma condición previa: el cese de las hostilidades. Y queda por resolver el problema de la comisión de investigación. Al igual que Peres, Solana también se mostró optimista tras sus entrevistas con Arafat, Barak y Mubarak. "Espero que podremos llegar en las próximas horas a una fórmula aceptable para todo el mundo", aseguraba Solana en El Cairo, mientras Peres confirmaba desde Roma los avances y aventuraba que la cumbre cuatripartita podría llevarse a término antes del fin de semana. Peres viajará el domingo a Madrid, en parte para compensar la sonada ausencia del ministro de Exteriores, Shlomo Ben Ami, del foro de Formentor la semana pasada, al que sí acudió Arafat, informa Peru Egurbide. El presidente José María Aznar recibirá a Peres el domingo.

Egipto aportó ayer su dosis de incertidumbre. Condiciona su colaboración a que se cumplan estas condiciones previas: la retirada de las tropas de Israel de las ciudades palestinas, la anulación por parte de Barak de las amenazas vertidas contra Siria, Líbano y el pueblo palestino, el compromiso del Estado hebreo de no repetir sus agresiones contra la mezquita de Al Aqsa y la formación de la comisión internacional de investigación.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_