Tarancón afirma que la mejor garantía para conservar El Cabanyal es la ley de patrimonio

El consejero de Educación y Cultura, Manuel Tarancón, salió ayer al paso de las declaraciones realizadas por el arquitecto Oriol Bohigas en el Encuentro Mundial de las Artes, que alertan sobre la destrucción de El Cabanyal, afirmando que "la mejor garantía para la conservación de El Cabanyal es la ley de Patrimonio". Ley que sólo contempla una excepción para intervenir en una zona declarada bien de interés cultural: la mejora de la misma. Una excepcionalidad que los técnicos de Patrimonio consideran que no está justificada en el proyecto municipal.

El consejero fue breve. Se ciñó a la legalidad vigente y no quiso hacer más declaraciones sobre la intervención de Oriol Bohigas, que ha sentado como un jarro de agua fría en la Consejería de Cultura y en el Ayuntamiento. Fiel a su espíritu provocador, el que fue uno de los principales responsables del diseño urbano de la nueva Barcelona indicó, al término de su alocución, en la que actuó a modo de representante de los prestigiosos arquitectos reunidos, que hay que salvar El Cabanyal sin destruirlo, alineándose así con la plataforma Salvem El Cabanyal cuyas protestas habían sido escuchadas en el encuentro.El aplauso repentino y generalizado que surgió del cualificado público convocado por la Generalitat y que reunía a más de dos centenares de artistas y expertos nacionales e internacionales y la difusión mediática que ha tenido el acontecimiento ha escozido en la Consejería de Cultura y en el Ayuntamiento. De modo que desde ambas instituciones y desde un sector de la opinión pública muy próximo al PP han surgido reacciones desabridas encaminadas a descalificar al arquitecto catalán, que planeó la reforma de Barcelona desde el gobierno del socialista Pasqual Maragall. También se ha criticado la intromisión de Bohigas en un proyecto que no le atañe.

El arquitecto reconoció después de su aplaudida intervención que no conocía bien el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) del Ayuntamiento, que incluye la prolongación hasta el mar, de la avenida Blasco Ibáñez a través de El Cabanyal, aunque sí el barrio. Explicó que hay otras alternativas de llegar al mar al tiempo que conservar el barrio sin la necesidad de partir una trama histórica, además declarada de bien de interés cultural, mediante una gran avenida.

Tarancón dice que su actuación siempre se ceñirá a la ley, aunque personalmente ha manifestado su opinión favorable al proyecto municipal. Tras dos polémicos aplazamientos, el proyecto está a la espera de un dictamen definitivo. Todo apunta a que será la subsecretaria de la Consejería de Cultura, Ascensión Figueres, quien se ocupará del mismo.