El PP culpa a los técnicos de actuar por su cuenta al retirar revistas con desnudos

El Ayuntamiento de Vitoria ha dado marcha atrás en la polémica de las revistas con desnudos. La concejal de Asuntos Sociales, María Ángeles Castellanos, del PP, acudió ayer por la mañana a los tres quioscos de la ciudad donde días antes funcionarios municipales habían obligado a retirar de los escaparates revistas con portadas de desnudos. Castellanos se dirigió personalmente a los dueños y les pidió perdón, alegando que los técnicos actuaron por su cuenta, llevados por un "exceso de celo" y sin ninguna directriz política.

Funcionarios del departamento municipal de Salud y Consumo recorrieron varios quioscos la semana pasada para recordar a sus propietarios que la ley impide exponer revistas de contenidos pornográficos tanto en los escaparates como en el interior. Entre las publicaciones que obligaron a retirar estaban algunas reconocidas como pornográficas y otras como Interviú, Primera línea y Man. De los cinco establecimientos visitados, los técnicos levantaron acta informativa en tres, por considerar que incumplen la normativa.Tras conocerse el caso y comprobar las reacciones inmediatas que causó, el alcalde, Alfonso Alonso, admitió veladamente el error de su gobierno y dijo que se debe actuar con flexibilidad. La siguiente consecuencia fue la visita de la concejal de Asuntos Sociales a los tres quioscos advertidos para pedir disculpas a sus propietarios. María Ángeles Castellanos no asumió personalmente el fallo, sino que terminó justificando las medidas por un "exceso de celo" de los funcionarios. Según ella, los técnicos recibieron quejas de ciudadanos e inmediatamente, sin consultar a los responsables políticos, visitaron los establecimientos. Y matizó: "Sólo se trataba de actas informativas, sin mayor validez. No hubo decomisos y somos conscientes de que los propios establecimientos se autoregulan muy bien. Esperemos que esto pase como una anécdota".

La concejal solicitó ayer al dueño de uno de los comercios que retirase un cartel donde se hacía constar la visita de los funcionarios municipales y la retirada de las revistas. Sin embargo, el propietario se negó mientras no reciba una nueva notificación por escrito del Ayuntamiento por la que se anule la orden anterior. Castellanos aseguró que remitirá una carta a los establecimientos afectados dejando sin efecto la visita de los funcionarios.

Con esta serie de rectificaciones, la concejal entiende que queda demostrado el talante del PP. "Se nos ha tachado de rancios, pero en realidad apostamos por recursos sociales como la oficina de asesoramiento a gays y lesbianas. Estamos a la cabeza en recursos sociales, por lo que no merecemos estos calificativos".