El Día europeo sin coche tuvo poco seguimiento en las capitales de Andalucía

El Día europeo sin coches se celebró ayer en todas las capitales andaluzas, excepto en Almería, con desigual seguimiento. En la mayoría de los casos, la repercusión de esta iniciativa sobre la circulación habitual fue escasa. La mayor o menor reducción del tráfico en cada ciudad se debió a los controles de las policías locales en los accesos al centro. La principal conclusión práctica de la jornada fue el compromiso de los gobiernos municipales de Cádiz y Sevilla de avanzar en la peatonalización de sus cascos históricos.

En Málaga, el día sin coches supuso sólo una menor densidad de tráfico escasamente apreciable. El tráfico se mantuvo fluido durante todo el día y no hubo retenciones distintas a otros días en las zonas que sí tuvieron tráfico rodado. Francisco Oliva, portavoz de la oposición socialista, consideró que el día sin coches había tenido un carácter "meramente simbólico" y que habría que haber cerrado al tráfico algo más que el centro histórico. Oliva acusó también a algunos concejales del equipo de gobierno de haber ido a trabajar en coche: "Han aparcado cerca y han venido andando desde allí", afirmó Oliva. Por su parte, el alcalde, Francisco de la Torre, reconoció que "quizá en otra ocasión el esfuerzo informativo y publicitario tenga que ser mayor".

La restricción del tráfico en el centro de Granada no ocasionó muchos problemas. El Ayuntamiento de la ciudad estimó que un 90% de los conductores accedieron a circular por las vías alternativas. "Un éxito", según el concejal de Tráfico, José Antonio Orta. La principal preocupación del Consistorio era el colapso de las calles ofrecidas como alternativas para la circulación. Sin embargo, según Orta, el tráfico fue fluido en Camino de Ronda, Severo Ochoa y el resto de vías.

Los autobuses públicos urbanos fueron utilizados por 10.000 personas más de lo habitual, pero la línea gratuita establecida especialmente para ayer no tuvo mucha aceptación. Los granadinos tampoco secundaron la propuesta municipal de acceder al centro en bicicleta.

En Cádiz, el Día europeo sin coches pasó sin pena ni gloria. La convocatoria no encontró la esperada respuesta de los conductores. En la zona acotada del casco antiguo, donde no estaba permitida la circulación de 12.00 a 21.00, muchos conductores no respetaron los cierres de calles. Según informó la Policía Local, este plan apenas tuvo incidencia en el tráfico, salvo una pequeña reducción en la densidad de vehículos a primera hora de la mañana en los accesos a la capital gaditana.

La jornada dejó, con todo, algo positivo para el futuro. El Ayuntamiento de Cádiz aprovechó esta iniciativa para iniciar el proceso de peatonalización del barrio histórico del Pópulo con una primera calle, Fray Felix, que quedó ayer cerrada definitivamente al tráfico.

La circulación de vehículos en el centro de Sevilla parecía la normal de otros días. Según datos del Ayuntamiento, la reducción del tráfico fue del 19% y el transporte público, reforzado para la ocasión, tuvo un 15% más de viajeros. Los atascos al mediodía fueron los habituales.

El alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, aprovechó la jornada para firmar con diversas asociaciones ciudadanas el Pacto Cívico por la Movilidad, que buscará soluciones a los problemas de tráfico en la ciudad e intentará conseguir que ciudadanos y turistas la disfruten más. El objetivo a largo plazo del pacto es la peatonalización progresiva del centro. Para empezar, el alcalde ha propuesto cerrar al tráfico las calles Méndez Núñez y O'Donnell y la avenida de la Constitución.