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El Ejército expresa su "acatamiento" a la decisión de Fujimori tras cuatro días de silencio

Cuatro días ha tardado la cúpula militar peruana en manifestar públicamente su lealtad al presidente Alberto Fujimori desde que el mandatario anunció en una intervención televisada a todo el país su retirada, la convocatoria de elecciones anticipadas y la desactivación del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN). El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas difundió ayer un escueto comunicado de cuatro puntos que no alivia el clima de incertidumbre que vive Perú. La nota del alto mando no hace una sola mención a la situación de Vladimiro Montesinos, el asesor presidencial, aparentemente destituido, que en los últimos 10 años ha dirigido con el pleno respaldo castrense el aparato de inteligencia político-militar.

"En cumplimiento de nuestro ordenamiento legal y subordinadas al poder constitucional, [las Fuerzas Armadas] expresan su acatamiento a la decisión del señor presidente de la República y Jefe Supremo de la República y de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional, manifestada en un mensaje a la nación el 16 de septiembre último". Tarde y mal. El retraso en la difusión del comunicado, firmado por los comandantes en jefe de las tres ramas de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional y la parquedad de sus palabras, no despejan completamente las dudas sobre la lealtad militar a Fujimori. El documento se difundió pasada la medianoche (hora peruana) después de una tensa jornada en la que proliferaron los rumores sobre supuestas reuniones conspirativas de los mandos militares. En él, el Comando Conjunto niega la celebración en los últimos días de ninguna reunión del comandante general del Ejército, José Villanueva Ruesta, con los jefes de las regiones militares, tal como se había especulado.

La crisis política sigue abierta tras la difusión del vídeo en el que el asesor presidencial, Vladimiro Montesinos, sobornaba a un diputado tránsfuga de la oposición al oficialismo. Pasan los días y no se desentraña su paradero ni el papel que puede jugar en el futuro. Diversas fuentes aseguran que Montesinos prepara en los despachos del SIN o del Cuartel General del Ejército su estrategia para sortear cualquier acción de la Justicia. El diario El Comercio informaba ayer de que el juez Alejandro Rodríguez Medrano, vocal de la Corte Suprema y uno de los magistrados más influyentes del poder judicial por sus vinculaciones con Montesinos, reunió a varios jueces para transmitir un mensaje de tranquilidad a sus compañeros y asegurar que el jefe del SIN contaba con el apoyo de los militares. Los ánimos en los tribunales están muy caldeados por el nerviosismo que provoca la inminente llegada del expediente acusador contra quien hasta hace una semana era considerado el hombre más poderoso de Perú. Tras el autogolpe de 1992 el poder judicial fue desmontado paso a paso para poner en pie una estructura dócil a los intereses de Fujimori, Montesinos y la cúpula militar.

La fiscal Nina Rodríguez Flores, nombrada para investigar el escándalo provocado por el soborno a funcionarios, solicitará el vídeo del soborno de Montesinos al congresista Alberto Kouri. La estrategia para exculpar al asesor tratará de demostrar que las imágenes y voces del vídeo difundido el pasado 14 de septiembre podrían haber sido manipuladas por los autores de la filtración y difusión de la cinta.

La gran incógnita es hasta qué punto la ruptura de Fujimori con su asesor preferencial es real. Una fuente muy próxima a una estrecha colaboradora del presidente asegura que Fujimori "se siente liberado" después de haber tomado la decisión de desactivar el SIN y de cortar las amarras que le han unido durante una década con el jefe de los servicios secretos. Pero al mismo tiempo, el primer mandatario no se atreve, hasta ahora, a decir públicamente que Montesinos ha sido destituido.

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