Los accidentes mortales suben un 40% en la capital durante los ocho primeros meses del año

Madrid ha sufrido en lo que va de año un preocupante aumento de accidentes mortales de tráfico. En los ocho primeros meses de 2000 han perdido la vida 60 personas, frente a los 42 fallecidos del mismo período en 1999. Se quiebran así las esperanzadoras estadísticas del año pasado, cuando se registró la cifra de muertos más baja de los últimos diez años, con 68 víctimas mortales en 12 meses. Con ese balance, Madrid se situó entre las ciudades europeas más seguras, según la Policía Municipal. Los atropellos siguen siendo un problema principal. La mitad de los fallecidos hasta agosto fueron peatones.

Vigilancia de autobuses

Tan sólo en septiembre han muerto, en 15 días, cuatro peatones, tres de ellos mayores de 70 años: una mujer de 90 y dos personas de 72, uno de ellos un hombre que salía de comprar el pan de una tienda situada debajo de su casa.La Policía Municipal reconoce que se ha producido "cierta alarma" por el número de atropellos mortales. Los agentes quieren responder con urgentes medidas de choque para reducir las imprudencias de conductores y peatones. "El año pasado tuvimos varios accidentes mortales de niños. Este año no se ha producido ninguno pero, sin embargo, han aumentado las muertes de mayores, por lo que hemos decidido potenciar las campañas preventivas de educación vial dirigidas a este sector de la población", añade un portavoz de la Policía Municipal. Se ha diseñado un calendario de charlas en centros de mayores que comienza en Usera y Latina.

Para este mes de septiembre, los agentes acudirán a los centros de mayores de Latina, ubicados en la calle de Ciudad de Méjico, Cebreros, Campamento y Nuevo Bermejo. En Usera están previstas conferencias y cursos en los centros de la tercera edad de la calles de Filiberto, Orcasur y Evangelio.

Los accidentes mortales en el centro de la ciudad no han sido los únicos que han aumentado respecto a 1999. En la M-30 también se ha duplicado el número de accidentes mortales. En los primeros ocho meses del año pasado murieron sólo cuatro personas en siniestros de tráfico y este año, entre enero y agosto, ya se han registrado ocho muertos en la vía de circunvalación. Dos de las víctimas han sido agentes de la Policía Municipal: un motorista y un miembro del equipo de radares móviles del 092.

Los responsables de la Subinspección de Tráfico de la Policía Municipal no se explican este aumento. La presencia de los radares fijos y móviles había propiciado que los accidentes disminuyeran hasta el año pasado, según la policía.

Paradójicamente, pese a que ha crecido el número de muertos en la M-30, disminuye la cifra de accidentes en los ocho primeros meses del año: 554 en 2000, 596 en 1999 y 616 en 1998.

En los ocho primeros meses del año, han crecido los siniestros en todas las bandas horarias, pero sobre todo hay dos horas especialmente peligrosas: de diez a once de la noche (seis muertos) y de cinco a seis de la madrugada (cinco muertos). Los accidentes nocturnos siguen siendo los más graves aunque en números absolutos se producen más accidentes de día, cuando hay más tráfico.

El periodo con mayor número de accidentes es el comprendido entre las ocho y las nueve de la mañana, y de tres a cuatro de la tarde, intervalos que coinciden con la entrada y salida a los puestos de trabajo.

Los choques contra objetos fijos también se han incrementado considerablemente (un 20%).

Para la Subinspección de Tráfico de la Policía Municipal, el aumento de los accidentes mortales es alto porque se compara con 1999, uno de los de menor siniestralidad de la pasada década. "Efectivamente han crecido los muertos en los ocho primeros meses del año, 42 en 1999 por 60 en 2000, pero en 1998 entre enero y agosto llevábamos 73", señala un mando policial.

Los autobuses escolares estarán vigilados por la Policía Municipal desde esta semana. Los agentes van a poner en marcha un dispositivo especial para controlar todos los vehículos destinados al transporte escolar y de menores. Para transportar a los escolares se necesita poseer una autorización concedida por el Ayuntamiento, que sólo la tramita cuando se ha presentado la tarjeta de inspección de vehículos y la póliza del seguro de responsabilidad civil junto con un certificado del colegio con el número de rutas y paradas que necesita. Los servicios municipales se encargan de analizar que la ruta no supera una hora de trayecto.

La Policía Municipal tramitó durante el curso pasado 340 denuncias por infracciones a la ordenanza municipal de transporte escolar de menores, aprobada en 1984. Las faltas más reiteradas fueron debidas a la falta de licencia municipal, carecer de un ejemplar de la ruta autorizada o no dejar visible el símbolo distintivo de transporte escolar.