El presidente portugués expresa a los Reyes su "indignación" por los atentados de ETA

Los Reyes cerraron ayer su primera jornada de visita de Estado a Portugal con una cena de gala ofrecida por el presidente luso, Jorge Sampaio, que aprovechó su discurso durante el banquete para expresar su "indignación" frente a la reciente oleada de atentados de ETA y asegurar que el pueblo español "puede contar con la solidaridad y la cooperación de Portugal en el combate al terrorismo". Don Juan Carlos agradeció "la clara expresión de condena" hacia la violencia de la banda terrorista, cuyos métodos para imponer sus ideas calificó de "deleznables".

Tras analizar el excelente momento que atraviesan las relaciones bilaterales, el presidente de Portugal afirmó que los dos países "deben asumir, de forma clara e inequívoca, la defensa de los intereses comunes, así como los valores compartidos de la democracia, el respeto por los derechos humanos y la solidaridad". Por tanto, añadió, "no podemos callar nuestra indignación frente a los actos criminales que han consternado a España en los últimos meses y que pretenden desestabilizar su democracia y minar los fundamentos del Estado de derecho". "Sepa su Majestad que cuenta con nuestra solidaridad y nuestra cooperación en el combate al terrorismo", agregó.Don Juan Carlos agradeció la "clara condena de la violencia terrorista que los demócratas sabemos apreciar como pleno respaldo a nuestra más profunda fe en la convivencia democrática, en la libertad y en los valores del Estado de derecho que, con tanto esfuerzo, hemos logrado consolidar y que nos hace grandes y fuertes frente a quienes han optado por la violencia como método deleznable de imposición de sus ideas a los demás".

Tribunales

En este sentido, el ministro de Exteriores portugués, Jaime Gama, reconoció, durante un almuerzo de trabajo con su homólogo español, Josep Piqué, que los intentos de colaboración antiterrorista con España, en clara referencia al caso Telletxea, han chocado con el obstáculo de los tribunales lusos. No obstante, Gama negó en rueda de prensa que el supuesto colaborador de ETA, detenido en mayo de 1996 en Lisboa y actualmente en situación irregular tras habérsele negado el asilo político y la residencia en Portugal, pudiera ser expulsado por vía administrativa a un tercer país (su extradición fue desestimada anteriormente), como han reconocido en diversas ocasiones los altos responsables del Servicio de Extranjeros y Fronteras (SEF) del país vecino.Sin embargo, un decreto ley de agosto de 1998 establece la expulsión administrativa de extranjeros, que podría ser decidida, en diversos supuestos, por el director del SEF y contra el que cabría un recurso ante el Tribunal Administrativo.

Ante las supuestas dificultades legales esgrimidas por Gama, Josep Piqué propuso a su colega portugués una modificación de la legislación para solucionar estos casos. El responsable español de Exteriores puso como ejemplo los recientes acuerdos adoptados entre Madrid y Roma para extraditar a los mafiosos italianos aunque éstos hayan sido condenados en rebeldía en Italia.

Por la mañana, don Juan Carlos recibió de manos de Sampaio el Gran Collar de la Orden de la Torre y la Espada, una condecoración reservada a los presidentes lusos una vez concluido su mandato. Sampaio y su mujer, Maria José Ritta, entregaron también a los Reyes un sonajero de plata para Victoria Federica, su nieta recién nacida.

Hoy, don Juan Carlos leerá un discurso solemne ante el pleno del Parlamento portugués, reunido excepcionalmente ya que sus sesiones no comienzan hasta el próximo día 15, y por la tarde verá a sus amigos de la infancia en Estoril. Asimismo, recibirá una condecoración en el Ayuntamiento de Cascais y se entrevistará con empresarios españoles que trabajan en Portugal.