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Reportaje:EMPRESASConfecciones Morales, SA

Hasta la 82 por pantalones

El debate sobre las tendencias de la moda, los hábitos que ésta propicia y los peligros puede llegar a plantear -caso de la anorexia entre adolescentes que quieren imitar a las top model-, no se circunscribe sólo a mujeres jóvenes o maduras frustradas por no encontrar prendas de su talla. El problema de dar con la ropa con que uno se encuentra cómodo no es ajeno a hombres, jóvenes o talludos, que ven difícil hallar en el mercado unos pantalones por encima de la talla 62, equivalente a unos 124 centímetros de cintura.Los 30 años de experiencia a través de tres generaciones y el conocimiento al detalle del mercado en el sector ha convertido a Confecciones Morales en una de las pocas fábricas de pantalones en España preocupadas en ofrecer tallas para una minoría. "Ha habido ocasiones en que incluso compradores finales han llamado a la fábrica para preguntar a qué tienda de su ciudad le suministramos nuestros productos porque le habían visto el pantalón a un amigo", comenta el gerente, Vicente Morales, heredero del negocio conducido antes por su padre y abuelo.

La firma trabaja sólo pantalón de caballero en línea clásica y sport para clientes con negocios de confección mediana de todo el país. "Hubo un tiempo que trabajamos también para grandes superficies comerciales, pero no interesan porque te acaban asfixiando e imponiendo sus condiciones", se queja el empresario. Todo tipo de tejidos, desde fibras naturales (lanas, linos, algodones) hasta sintéticas y de alta tecnología (viscosas, poliéster, microfibras, strech), salen en forma de pantalón desde la fábrica almeriense.

Los detalles de confección tradicional artesana, la cuidada selección de artículos, junto con la variada gama de dibujos y colores en todas las colecciones permite a Confecciones Morales mantener la actualidad en sus modelos. "Seguimos teniendo un proceso semiartesano porque casi todo el procedimiento de elaboración del pantalón es a mano. Todavía no se ha inventado la máquina que meta una tela y saque un pantalón ya hecho. Por eso no es de extrañar que la confección de este tipo de prendas predomine en países subdesarrollados", reflexiona Guillermo Monerri, comercial de la empresa desde sus inicios.

Las explicaciones de de Monerri se pueden corroborar con sólo bajar a la planta de trabajo de la empresa. En ella 15 mujeres elaboran diariamente una media de 160 pantalones y en cada uno de ellos ejecutan 51 operaciones diferentes: marcado en tela, corte, sobrehilado, elaboración de los bolsillos, complementos, montaje de las piezas y planchado.

Estas operaciones, genéricas para todo tipo de pieza, encierran luego suboperaciones dentro de cada tarea. Sin ir más lejos, sólo la confección de un bolsillo implica también tareas relacionadas con el forro, el punto a la boca, asentar listas, colocación de presillas o remallar a cintura. El resultado obtenido no es otro que el diseño previo de una idea creada por un equipo de dos personas de la empresa para cada modelo fabricado.

Para el gerente de Confecciones Morales el mérito de su empresa, amén de ofrecer "siempre" calidad y servicio, es haber sabido permanecer "todo" el tiempo. "Dejar lo mismo es ir quedándote atrás. A la fuerza hay que innovar y nosotros lo hacemos con todo, incluso con el anagrama, que hemos cambiado por el símbolo del indalo", apunta.

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Los empleados más veteranos de la fábrica almeriense, que vivieron los inicios de una modesta empresa familiar, hacen también balance positivo de los años transcurridos. "Vicente Morales Jiménez empezó haciendo pantalón de cadete, vendiendo botones, hilos y cremalleras. Era un hombre con poca preparación pero llegó a tener 114 trabajadores" explica Paqui, administrativa de la empresa.

Lo que empezó casi como una mercería estudia hoy día la posibilidad de abrir mercado internacional para exportar a diversos destinos europeos, como Francia o Alemania. De lograr sus propósitos, si encuentran distribuidores, la filosofía de Confecciones Morales seguirá siendo la misma: "Nuestro fuerte está en la lana. Nacimos con el vestir y dentro del pantalón de vestir los tocamos todo".

Datos de interés

Dirección Calle Rubí, 1/ 04007 Almería

Empleos 20 trabajadores fijos

Facturación 70 millones de pesetas en 1999

Producción Pantalones de vestir y de sport

Una quincena de mujeres elaboran una media diaria de 160 prendas, en las que ejecutan más de 50 operaciones

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