Casi 400 líderes de los 'sin tierra' han sido asesinados en la última década

Nuevas detenciones

El Movimiento de los trabajadores rurales Sin Tierra (MST), uno de los movimientos de izquierdas más organizados y activos de América Latina, está sufriendo un nuevo acoso por varios costados. Sus víctimas se multiplican. Hasta agosto habían sido asesinados ya 22 de sus dirigentes en lo que va de año contra los 26 de todo 1999. Además, según datos de la Comisión Pastoral de la Tierra del Episcopado de Brasil, sólo en los años noventa los líderes rurales de los sin tierra asesinados (370) superan a las víctimas de la dictadura militar, que fueron 281.Desde 1985, e incluyendo a las dos últimas víctimas de esta misma semana en el Estado de Mato Grosso, el número de víctimas del MST ha llegado a 1.180.

Pero lo que más preocupa a los responsables del Movimiento y a los obispos que siempre han apoyado a los trabajadores rurales que luchan por obtener un trozo de tierra en propiedad y para organizarse en cooperativas agrícolas para hacer fructificar los inmensos latifundios sin cultivar, es que está surgiendo una nueva forma de eliminar a sus militantes y líderes más activos.

Según Isidoro Rezes, coordinador nacional de la Comisión Pastoral de la Tierra, existe una violencia más sutil y peligrosa contra los líderes rurales que está siendo organizada por la Unión Democrática Ruralista (UDR) que reúne a las grandes lobbies de los terratenientes. Según Rezes, la violencia contra los sin tierra, que años atrás aparecía como simples venganzas personales de los propietarios de terrenos ocupados, ahora se ha convertido en una acción organizada para y los colonos están usando empresas de policía privada.

El ministro de la Reforma Agraria, Raúl Jugman, ha declarado que si se demuestra tal hipótesis dichas empresas perderán su autorización para funcionar. El ministro ha afirmado que en general la violencia contra el MST ha disminuido, aunque levemente. Por su parte, João Pedro Stédile, líder nacional de los sin tierra, contradice al ministro con cifras en la mano. Según Stédile, sólo en este año fueron detenidos 180 dirigentes del movimiento. Según el abogado de la Comisión Pastoral de la Tierra del Estado de Paraná, Darci Frigo, las cifras del dirigente del dirigente se quedan pequeñas, ya que sólo este año en Paraná fueron detenidos 151 militantes.

Los dirigentes del MST acusan al Gobierno del presidente Cardoso de servirse de la máquina del Estado, sobre todo del poder judicial y policial, para amedrentar y enflaquecer al movimiento con las continuas detenciones de sus militantes y con la impunidad de los hacendados ante los asesinatos.

Amnistía Internacional (AI) denunció ayer que el sistema judicial brasileño "ha demostrado que es incapaz de investigar y procesar de forma eficaz a los responsables de graves violaciones de los derechos humanos". AI rechaza la absolución de tres agentes de la Policía Militar en relación con una matanza, en 1995, de diez campesinos.