La depreciación del euro y el alza del precio del crudo elevan un 148% la factura energética

El alza del precio del petróleo y la debilidad del euro han encarecido la factura energética española un 148% durante el primer semestre del año con respecto al mismo perioro del año anterior, según datos de Aduanas. Ésta es la principal causa de que el déficit comercial mantenga un alto ritmo de crecimiento (44,2%), hasta alcanzar los 3,2 billones de pesetas, un billón más que en el primer semestre del pasado año. De esa cantidad, el 72% proviene del petróleo. En total, las importaciones han crecido (24,3%) más que las exportaciones (18,9%), pese a lo cual la tasa de cobertura ha mejorado (75,3%)

Advertencia al sector turismo

Los resultados del comercio exterior del primer semestre del año indican una leve mejora en el saldo entre importaciones y exportaciones. El déficit comercial ha aumentado un 44,2% en relación al mismo periodo del año anterior, cuando hasta mayo el incremento era del 46,2%, y en el primer trimestre, del 52,1%.La cifra alcanza los 3,2 billones de pesetas, un billón más que en el primer semestre de 1996. De esta cantidad, 728.000 millones de pesetas (un 72%) se derivan del déficit de la factura energética, y los 280.000 millones restantes, de las demás partidas del comercio exterior.

El coste que para la economía española ha supuesto la compra de productos energéticos se ha incrementado un 148,4% en el primer semestre del año respecto del mismo periodo del año anterior. El alza sólo en junio fue del 172%. Esto es consecuencia de la fortaleza del dólar, moneda en la que se pagan estos productos, del aumento de los precios del petróleo y de la alta dependencia española.

En parte como consecuencia de esta situación crítica en los mercados de la energía -agrava-da en los últimos días-, las importaciones en conjunto registran una tasa de crecimiento elevada (24,3% en el primer semestre), aunque por debajo de la registrada hasta mayo (24,7%) y en el primer trimestre (25,6%).

La otra causa es el fuerte tirón de la economía española en ese periodo. Tanto la inversión como el consumo se aceleraron en el primer trimestre del año (6,3% y 4,5% en términos reales, es decir, descontada la inflación), aunque, según Comercio, esta tendencia se ha moderado en el segundo trimestre (los datos se conocerán el próximo 20 de septiembre).

Las exportaciones, por el contrario, se han acelerado, aunque de forma débil. En el primer semestre del año el incremento de las ventas españolas al exterior ha sido (18,9%) sólo una décima superior al registrado hasta mayo (18,8%) y ligeramente por debajo de la tasa del primer trimestre (19,1%).

El resultado de junio sobre el mismo mes del año anterior indica igualmente una tendencia a la desaceleración del déficit (aumento del 35%, frente al 38,7% de un mes antes), también de las exportaciones (19,1% frente al 21,3%) y de las importaciones (22,3% frente al 25,6%).

El encarecimiento del precio del petróleo registrado en los últimos días de septiembre augura, de no corregirse, un empeoramiento del saldo comercial español para lo que queda de año. Pese a ello, el secretario de Estado de Comercio, Juan Costa, calificó ayer de "positiva" la evolución de las exportaciones, lo que junto a la "desaceleración" de las importaciones permitirá reducir a medio punto del PIB la aportación negativa del sector exterior a final de año.

En cuanto a la composición geográfica del comercio exterior, destaca el aumento del 15,5% en las exportaciones a los demás países de la zona euro y del 14,4% hacia el conjunto de la UE. Las importaciones crecen por encima en ambos casos (el 17,7% y el 17%, respectivamente).

La incóginita es si los países centrales de Europa van a proseguir su recuperación o si ésta se verá truncada por el alza de los precios del petróleo y el encarecimiento del precio del dinero. En este último caso, el comercio exterior español resultaría más dañado, ya que el 71,7% de nuestras exportaciones tienen como destino los países de la UE.

En cuanto al sector del turismo, Costa avanzó ayer que en los primeros siete meses del año el número de entradas aumentó un 3,2%, en línea con las previsiones oficiales. Aseguró que los ingresos por turismo ayudarán este año a financiar en un 80% el déficit de la balanza corriente. Costa insistió en pedir al sector turístico que modere sus precios.