Es incendiado el locutorio de un senegalés en Terrassa

Cheikhouba Mbacke, de origen senegalés, se encontró en la madrugada del sábado con un panorama desolador: cristales rotos desparramados por el suelo y restos calcinados en el interior del locutorio que posee en Terrassa. Unos desconocidos habían lanzado un cóctel mólotov contra el local, frecuentado por inmigrantes, ya que ofrece tarifas reducidas para llamar al extranjero. Según la Policía Municipal, se trata de un hecho aislado, un "acto vandálico", y no cree que detrás del ataque haya ninguna banda racista. En opinión de Mbacke, que está convencido del origen racista de la agresión, lo que trata de hacer la policía es "camuflar el incidente para evitar problemas".

Los agentes explican que el fuego se apagó solo y no fue necesaria la intervención de los bomberos. Cuando Mbacke acudió al lugar, tras ser avisado por la policía, no había nadie. Asustado, pidió protección policial para ser acompañado al interior del local. Considera que los agentes se demoraron demasiado.

Este ciudadano, que reside en Terrassa desde hace cuatro años, posee otros establecimientos en Sabadell, Rubí, Madrid, Navarra y las islas Canarias, y explica que ésta es la primera vez que es víctima de una agresión.