Tomadura de pelo
Vivo en uno de los muchos pueblos que forman la provincia de Burgos, por eso recibí con enorme satisfacción la llegada de las nuevas tecnologías en comunicaciones al entorno rural. Desde que éstas llegaron, puedo estar en contacto con todo el mundo, por fin algo como lo que tienen los de la capital. Pero eso sólo es en teoría: cuando bajo al mundo real me doy cuenta de que esto no es la ciudad, por eso hay que hacer uso de un nodo de conexión local utilizado por mucha gente. Por eso iba lento, claro; eso se soluciona con una RDSI, me dijeron (iluso de mí), así que la instalé. Durante un tiempo funcionó bien, pero luego volvimos a las mismas. Ahora resulta que llevo dos semanas sin poder acceder a mi correo y sin poder navegar. Pero cuál es mi sorpresa cuando después de muchas llamadas a un maravilloso 902 me dicen que la conexión es correcta, que todo está bien y que el problema es el nodo, que está saturado, que de todas formas no me preocupe porque si es muy urgente, con conectarme al nodo provincial se soluciona. Señores de Telefónica: ¿por qué se van a invertir billones de pesetas fuera, si no tienen arreglado el problema de dentro? ¿Por qué se llevan los dineros que estamos pagando por un caro servicio que ustedes no nos prestan? ¿Por qué tengo que pagar como llamada provincial cuando tienen la obligación de ofrecerme el servicio como llamada local? ¿Es que en este país todavía quedan ciudadanos de segunda? ¿No tenemos ya b
astantes desigualdades?
Por desgracia, nos seguirán tomando el pelo, y a la hora de pagar, tarifas iguales para todos. Viva el progreso y los que se forran a costa de él.- Pepe Casado. Villarcayo, Burgos.
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