Varios alcaldes y los ecologistas culpan a la compañía ferroviara

El alcalde de Bustarviejo, Julio de Mateo (PP), reiteró ayer su convencimiento de que Renfe es la culpable del incendio que afectó a su municipio, y que el fuego "se originó por las chispas que desprendía el Talgo Madrid-Irún". No es el único en opinar así. El mismo argumento fue esgrimido por los primeros ediles de Navalafuente, Villavieja de Lozoya, Braojos y Robregordo. Todos estos municipios están situados en la ruta Madrid-Burgos y el jueves vieron cómo ardían más de 250 hectáreas de sus términos. Óscar Monterrubio, alcalde de Robregordo (PSOE) y diputado en la Asamblea de Madrid, culpó ayer a la compañía ferroviaria de no realizar, en este verano, los trabajos de mantenimiento de las márgenes de la vía limpiándolas de rastrojos para "evitar que se prendan por las chispas que se puedan originar por la fricción entre las ruedas de los trenes y los raíles". Según Monterrubio, esta labor se ha hecho todos los años "pero en éste aún no se ha hecho". El alcalde no entiende por qué este año Renfe no ha adecentado la vía "después de una primavera muy lluviosa y una abundante vegetación". Monterrubio comunicó ayer estos extremos a la viceconsejera de Medio Ambiente, Paz González, y le solicitó una investigacion al respecto.

Similares términos ha utilizado la organización Ecologistas en Acción, que también achaca a Renfe la responsabilidad de los incendios en este tramo de vía "por no limpiar el trazado de hierbas, rastrojos y pastos secos". María de los Ángeles Nieto, portavoz de la organización ecologista, explicó que esta labor es competencia de Renfe, y culpó a la compañía de no efectuar esta limpieza "antes del periodo de riesgo de incendios" en época estival.

Por la vía circulan principalmente trenes de largo recorrido. Sólo la utilizan los trenes Talgo Madrid-Irún, el Talgo Puerta del Sol, con destino a París; un tren regional y el resto del tráfico ferroviario corresponde a convoyes de mercancías, explicó Monterrubio.