Napster negocia con las casas de discos
Napster, la página web que la semana pasada resistió el ataque legal lanzado por las discográficas norteamericanas, está dispuesta a negociar con la industria. La compañía californiana, que ha sido acusada de pirateo por difundir contenidos musicales gratuitamente en Internet, asegura que las dos partes tienen mucho que perder en batallas legales y deberían abordar juntas los retos que plantean las nuevas tecnologías al respeto de las leyes sobre derechos de autor. "Éste es el tipo de caso que debería resolverse con un acuerdo", dijo el pasado domingo el presidente de Napster, Hank Barry."Las 22 millones de personas que utilizan nuestra página son los mejores clientes de la industria". El pasado viernes, y para demostrar que los aficionados a la música no dejan de ser buenos compradores por el mero hecho de utilizar Napster, Barry pidió a sus usuarios que fueran a comprar CD de sus artistas favoritos.
Descarga gratuita
Napster.com es un servidor que conecta bilateralmente ordenadores para descargar gratuitamente archivos musicales. La industria le acusa de haber perdido más de 300 millones de dólares (unos 52.500 millones de pesetas) en su año de existencia y de violar las leyes de derechos de autor al permitir el intercambio de los contenidos de sus catálogos sin abonarles un centavo. La Asociación Discográfica de América (RIAA) consiguió la semana pasada que una juez de San Francisco ordenara el cierre de esta página bajo la acusación de pirateo, decisión que fue suspendida en el último minuto por un tribunal de apelaciones, el pasado viernes."Creo que hay un auténtica posibilidad de acuerdo, pero todavía no hay discusiones en serio", dijo Barry. Por ahora todo está en el aire hasta que empiece el juicio, probablemente en otoño. El presidente de la pequeña compañía de San Mateo reconoce que los artistas cuyas canciones circulan por la red deberían recibir algún tipo de compensación. El problema reside en la forma. Por ahora la única respuesta de Illary Rosen, presidente de la RIAA, ha sido: "Tienen nuestro teléfono".
Todos los analistas del sector aseguran que, tarde o temprano, las discográficas se verán abocadas a negociar con Napster. La página web es sólo uno de los exponentes de un fenómeno que la industria no se ha atrevido realmente a abordar y que ahora le está costando muy caro: el del profundo cambio que han introducido las nuevas tecnologías.
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