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VERANO2000

Cádiz se examina para que sus playas sean las primeras en lograr un certificado de calidad

Los técnicos de Aenor visitarán hoy el litoral gaditano, donde trabajarán una semana

Las playas de Cádiz pueden ser las primeras del mundo en obtener un certificado Aenor (Asociación Española de Normalización) sobre la calidad de la gestión ambiental, utilizando la norma ISO 14.001, que establece los parámetros más estrictos. El trabajo, que comenzó hace casi un año, entra hoy en su recta final con el examen que practicarán dos auditoras contratadas por el municipio. Mañana, los técnicos de Aenor visitarán las playas y desarrollarán su trabajo durante una semana. El certificado, si todo marcha correctamente, se expedirá en septiembre.El Ayuntamiento de Cádiz cree que ha llegado el momento de superar el valor de las banderas azules, "un símbolo que ha sido de mucha utilidad durante un tiempo", según el concejal de Playas, Jesús de Sobrino (PP), pero cuya concesión ha incurrido en contradicciones y ha perdido consideración. El certificado de la calidad de la gestión medioambiental, que hasta ahora sólo poseen espacios protegidos y zonas naturales, supone un compromiso con la calidad y sobre todo un examen continuo que cada año sube el listón. Una vez que las playas de la Victoria y Cortadura consigan el certificado, se irán introduciendo exigencias de calidad que alcanzarán al más mínimo detalle: desde la obligación de los chiringuitos de utilizar detergente biodegradable hasta controlar exhaustivamente el estado de limpieza y de conservación de las máquinas que entran en la playa, un recinto donde trabajan 250 personas durante la temporada alta.

Las dos consultoras contratadas (Ozonia y Ernst & Young) trabajan sobre el terreno desde hace un año. Han recogido muestras, han estudiado cientos de formularios y han diseccionado por completo el trabajo que se practica sobre estas superficies. De Sobrino explica que el trabajo de los técnicos ha consistido "en cuestionar todos los aspectos de la gestión", desde el reciclaje de pilas hasta el material de las tuberías de los chiringuitos. "Se trata de un examen a fondo, pormenorizado hasta no encontrar fisuras". Las consultoras han analizado 30 tipos de algas diferentes y otras 35 especies marítimas; han estudiado la influencia de los vientos dominantes y del entorno urbanístico. Ambas empresas han emitido un diagnostico positivo sobre la gestión de las playas, que disponen de un presupuesto de 300 millones de pesetas anuales. El edil no cree que la iluminación extraordinaria de las playas suponga ninguna contradicción respecto a la certificación de gestión ambiental que se persigue así como que vaya a suponer algún tipo de obstáculo para obtenerla.

Las playas de Cádiz pasarán a gestionarse mediante un sistema de objetivos y meta que implantará una dirección integral que afectará a todos los departamentos que, directa o indirectamente, tengan relación con ellas. "Es un cambio de filosofía, una especie de bandera azul permanente pero más rigurosa y con retos por cumplir cada año", explica de Sobrino, que ha organizado unas jornadas nacionales sobre gestión de playas para el mes de septiembre. Pretende que en ese encuentro las ciudades españolas con las playas más relevantes creen una marca que supere a las banderas azules. El viernes estuvo en Cádiz el concejal de Playas de San Sebastián Javier Urbiztondo, que pretende obtener el segundo certificado del mundo para La Concha, que acaba de iniciar sus auditorías internas.

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