La mirada plástica contemporánea del Este europeo se instala en la Ciudadela de Pamplona
Una muestra presenta, por vez primera, obras inéditas de siete destacados artistas
Siete artistas que entienden Europa como una realidad cultural y humana única y no como un espacio geográfico con múltiples variantes étnicas constituyen el eje de la exposición Pintores contemporáneos de la Europa del Este que se puede ver en la Ciudadela de Pamplona (Avenida del Ejército s/n) hasta el próximo mes.Vinculada al desarrollo de los Festivales de Navarra, dedicado este año a la cultura balcánica, la muestra reúne 29 obras de destacados autores plásticos de Eslovenia, Eslovaquia, Croacia, Armenia y Carintia-Austria que nunca antes han sido vistas en España y que pertenecen a la colección de la Fundación Keleia, institución eslovena que lleva trabajando desde 1988 en la promoción de casi un centenar de artistas contemporáneos procedentes de 22 países y que posee unos fondos propios de más de 400 obras.
Nombres como el del esloveno Andrej Jemec, uno de los mejores pintores que ha dado ese país en el siglo XX, forman parte de una exposición en la que participan también Valentín Oman, Joze Ciuha, Igor Roncevic, Stanislav Bubán, Ivica Krosláková y Ashod Bayandour.
A través de sus más recientes trabajos, posteriores todos ellos al año 1995, los artistas ponen de manifiesto la unidad cultural que les une al resto del continente. Se trata de obras de gran formato en las que predominan las texturas fuertes, la abstracción y diferentes tipos de paisajes interiores llenos de color, como los de Andrej Jemec, que ha acudido a Pamplona junto al director de la Fundación Keleia, Matjaz Gruden.
El comisario de la exposición, el artista pamplonés Carlos Ciriza, destacó en la presentación de estas obras la fuerza de la abstracción geométrica de Valentin Oman,; el lenguaje gráfico de Joze Ciuha; la provocación lírica de Igor Roncevic; la ausencia de la luz de las obras de Stanislav Bubán; el equilibrio entre pintura y escultura de la única mujer presente en la muestra, Ivica Krosláková, y la suspensión entre tradición y presente de Ashod Bayandour.
