5.700 millones del Plan de Vallecas se destinarán a combatir el fracaso escolar

Los programas contra el fracaso escolar se llevarán un tercio (5.705) de los 18.000 millones que el Gobierno regional invertirá en Puente y Villa de Vallecas en los próximos seis años para paliar los problemas de paro y marginación social. La Comunidad y las asociaciones vecinales han acordado que para 2005 los colegios públicos de la zona tengan 90 profesores más de apoyo y cinco nuevos gabinetes psicopedagógicos. El 22% de los alumnos vallecanos no acaban la enseñanza básica, frente al 11% de media de la capital.

Los distritos de Puente y Villa de Vallecas, con 285.265 habitantes (la décima parte de la población de la capital), tienen unos índices de paro, fracaso escolar, analfabetismo y marginación social que superan con creces la media del municipio de Madrid. Por eso las asociaciones de vecinos de la zona llevaban reclamando al Gobierno regional un plan especial de inversiones, similar al iniciado en 1998 en Villaverde y Usera, para buscar soluciones a estos graves desequilibrios.El fracaso escolar es uno de los problemas que más preocupan a las asociaciones vallecanas. Un 23% de los escolares de Puente de Vallecas y un 21% de los de Vallecas Villa no han finalizado satisfactoriamente la educación básica (desde los 6 a los 16 años), cuando el índice medio de fracaso escolar en el municipio es del 11%. En toda la ciudad, sólo el distrito de Usera se acerca a estos porcentajes (con casi un 20%).

El fracaso escolar está muy relacionado con el elevado número de alumnos que precisan refuerzos educativos por sus problemas familiares (hijos de drogodependientes, de reclusos...), su pertenencia a minorías étnicas como la gitana, que sienten la escuela como algo ajeno y a menudo hostil, o por tratarse de inmigrantes que desconocen la lengua y cultura españolas.

Un 25% de los alumnos de los colegios públicos (que son los que escolarizan mayoritariamente a las minorías desfavorecidas) de Puente de Vallecas y un 28% de los de Villa de Vallecas son chicos con necesidades educativas especiales. Esto no es extraño al tratarse de distritos con el mayor parque de vivienda social de la ciudad y en los que, tradicionalmente, han existido poblados chabolistas como La Celsa, La Rosilla o el Pozo del Huevo.

Entre las medidas acordadas para paliar esta situación está la de evitar que en las nuevas matriculaciones se concentren en un colegio más de un 10% de niños con necesidad de refuerzo escolar. Para ello las comisiones de escolarización intentarán distribuir el alumnado necesitado de apoyo entre todos los centros públicos y concertados de la zona. Ahora, un centro con más de un 50% de niños de minorías desfavorecidas, como el Núñez de Arenas, en el Pozo del Tío Raimundo, y otros con un 30% o un 35% de alumnado de integración, como el Quijote, el Juan de Herrera, el Padre Mariana o el Javier de Miguel.

Para 2005, el cerca de medio centenar de colegios públicos vallecanos contará con 90 nuevos profesores de apoyo a los claustros actuales y se abrirán cinco gabinetes psicopedagógicos (ahora hay uno) con 28 psicólogos, pedagogos, trabajadores sociales y educadores, que ayuden a los chicos con más dificultades.

Otra medida aún pendiente de negociación con la Comunidad y, sobre todo, con los sindicatos de enseñantes, es garantizar la estabilidad de las plantillas de profesores de cada colegio para poder desarrollar proyectos educativos estables. Asimismo, se dedicarán 500 millones de pesetas en cinco años para el desarrollo de actividades extraescolares.

Para el próximo otoño está también prevista la apertura de la escuela infantil del Pozo del Tío Raimundo, edificada hace seis años tras la remodelación de este barrio y vacía desde entonces. En seis años deben construirse otras dos escuelas infantiles.

Además de estas actuaciones, el plan, consensuado entre la Comunidad y las asociaciones de vecinos, contempla otras intervenciones. Algunas de ellas están ya fijadas, pero el calendario definitivo no estará listo hasta septiembre.

- Empleo. Un 27% de los vecinos de Puente de Vallecas y un 22% de los de Vallecas Villa están desempleados, frente a la media del 18% de parados que hay en el resto del municipio. En seis años se van a invertir 1.964 millones para crear centros ocupacionales, escuelas talleres de jardinería y albañilería y para poner en marcha cursos formativos para parados y acciones de apoyo al pequeño comercio.

- Cultura. Se destinarán 1.100 millones a actividades culturales y a programas de animación a la lectura. Asimismo, para el 2003 se abrirá un centro cultural y una biblioteca de distrito en un edificio de la UVA de Vallecas que llevaba años inutilizado y que, hace un par de años, la Delegación del Gobierno quiso convertir en comisaría, topándose con la oposición vecinal.

- Servicios sociales. Esta partida, con 2.914 millones, es una de las más cuantiosas, junto a las de Educación y Urbanismo. Está prevista la apertura de una residencia de ancianos de 189 camas con 40 plazas de centro de día y la puesta en marcha de 40 pisos tutelados para mayores que todavía se valen por sí mismos. Se habilitará un centro ocupacional para discapacitados y pisos para menores tutelados.

- Sanidad. La apertura del prometido hospital de Valdebernardo es una de las reivindicaciones de las asociaciones vallecanas, pero no se incluye dentro del plan. En total, a programas sanitarios se dedicarán 1.832 millones. Está prevista la apertura de un ambulatorio y un hospital de día especializados en salud mental y también de un nuevo centro de atención a drogodependientes (ya existe uno en el Puente).

- Deportes y juventud. En nuevas instalaciones deportivas se invertirán 879 millones. Entre ellas se incluye un polideportivo cubierto en Entrevías, dos frontones y cinco canchas de baloncesto, así como la creación de escuelas de voleibol, atletismo, balonmano, tenis, ciclismo... A juventud se dedicarán 260 millones para crear media docena de locales de ensayo para grupos musicales en las estaciones de metro de la zona, seis ludotecas infantiles y dos centros de información juvenil en la UVA y el Pozo.

- Chabolismo. La erradicación de los poblados marginales de casas bajas de La Celsa y La Rosilla, conocidos como importantes puntos de venta de droga, es un compromiso adquirido por el Gobierno regional con los vallecanos que está a punto de cumplirse. Hace una semana se derribó la última casa en La Celsa y para otoño se desmontará La Rosilla. Después comenzarán a derribarse las chabolas del Pozo del Huevo y a realojar a sus habitantes. La espina vecinal es ahora el poblado de Las Barranquillas, que ha tomado el relevo a La Celsa y La Rosilla como hiper de la droga, aunque está más alejado del casco urbano.

Las asociaciones de vecinos de Puente y Villa de Vallecas llevan intentando que la Comunidad apruebe un plan especial de inversiones para sus distritos desde la puesta en marcha, en 1998, de un programa así en Villaverde. El acuerdo entre las entidades ciudadanas y el Gobierno regional llegó a principios de este año, pero vino precedido por una disputa iniciada cuando el viceconsejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, tachó de "racistas" a estas asociaciones por negarse a aceptar en Vallecas más realojamientos de chabolistas gitanos por considerar que ya se han realizado suficientes.