El alto precio del petróleo amortigua los efectos de la crisis económica venezolana
La salida de capitales del país en los últimos seis meses supera los ingresos por el crudo
El incremento de los ingresos petroleros amortigua los efectos de la crisis económica venezolana desde la investidura de Hugo Chávez, un retroceso que explica la caída de la popularidad del presidente del 80% en 1999 al 59% en la actualidad. La inflación bajó al 6,8% durante el primer semestre, contra el 10,1% del mismo periodo en el año anterior, pero el errático comportamiento de otras variables certifican la crisis. Un informe de los bancos Mercantil y Santander de Venezuela señala que en seis meses ha huido del país más dinero del que entró por el petróleo.
La hegemonía política del chavismo permitió aprobar los rupturistas cambios institucionales pretendidos por el Gobierno, mientras que la economía, subordinada a esos objetivos y atemorizada por el tremendista discurso del comandante, registró en 1999 la peor contracción en una década: el producto interior bruto (PIB) cayó 7,2 puntos pese a haberse triplicado los precios del principal producto de exportación de Venezuela: el petróleo, que genera más del 70% de los ingresos presupuestarios. El precio del barril de crudo pasó de 7,50 a 24 dólares al cierre del pasado ejercicio.Las inversiones españolas en Venezuela, un nación que importa el 80% de los productos consumidos, apuestan por el futuro y rondan los 1.600 millones de dólares evolucionando "muy bien", según fuentes diplomáticas. El BBVA, el Santander Central Hispano, que controla el 94% del Banco de Venezuela, Repsol, Santillana, Planeta, Elecnor, cadena Meliá, Iberdrola o la ONCE son algunas de las 80 empresas con intereses en este país. La compañía Indra adquirió un especial protagonismo y dividendos desde 1998, pues se ha encargado de la automatización de las seis elecciones efectuadas desde entonces. El contrato para los comicios de hoy asciende a 21 millones de dólares.
No obstante, las inversiones proseguirán en medio de la incertidumbre política y jurídica. Según la Superintendencia de Inversiones Extranjeras, disminuyeron en un 66% y, de acuerdo con el Banco Central de Venezuela, un 40%. Chávez ha prometido convertirse en empresario a partir de mañana. En ello confían los capitales. Fuentes oficiales aseguran, por otra parte, que se detuvo la caída libre del PIB y la recuperación será sostenida a finales de año, con un crecimiento del 2,2%, de la mano de las inversiones anunciadas por el Gobierno, principalmente en infraestructuras. Durante el primer trimestre creció un tímido 0,3%. La buena evolución en los precios se debe a la relativa estabilidad del cambio y al estancamiento de la actividad.
Cierre de empresas
A la espera de que los hechos confirmen estas previsiones, la realidad es que el consumo se vino abajo, la recesión cerró más de 1.000 empresas e industrias de los sectores de la construcción, manufacturero, textil y petrolero, y más 600.000 personas perdieron su trabajo. "Me quedé sin empleo al cerrar un comercio de ropa", dice Eusebio, vendedor callejero de libros viejos en Sabana Grande, sepultada por vendedores ambulantes. "Aparte de votar mucho, se ha hecho muy poco", agrega un hombre de negocios español con buenos contactos en el Ejecutivo. Las ventas en el sector del comercio y de los servicios cayeron un 17,3% durante el primer semestre de este año, según un informe de la Cámara Consecomercio. El paro oscila, según distintas fuentes, entre el 14% y el 20%, pero la economía informal emplea al grueso de la población activa.El riesgo-país de Venezuela es puntero en la región y la salida de capitales alcanzará los 7.800 millones de dólares a finales de año, contra los 4.600 millones huidos en 1999, según Pedro Carmona, vicepresidente de la patronal Fedecámaras. La inflación, de acuerdo con ese ejecutivo, rondará el 18% a finales de año y la sobrevaluación de cambio de la moneda nacional, el bolívar, es del 35%. Las fuentes consultadas por este diario precisan, sin embargo, que los fundamentos esenciales de la economía venezolana, a la espera de la reforma fiscal y otras exigencias de la modernización, no son malos. "Las reservas en divisas son altas (16.000 millones de dólares), el fondo de estabilización macroeconómica almacena 2.000 millones de dólares, los tipos de interés disminuyen, el nivel de endeudamiento es asumible (22.000 millones de dólares, la mitad reestructurado), y son buenos pagadores", comenta un técnico europeo.
Por su parte, fuentes del BBVA explican que la subida de los precios del crudo ha otorgado al país holgura en su gestión fiscal, sector externo y política cambiaria. De hecho, las aportaciones fiscales adicionales de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) han permitido más recursos para financiar el gasto público, que se ha disparado en más de un 50%, después de descontadas las obligatorias aportaciones al rescate de la deuda y a los Fondos de Estabilización Macroeconómica (FIEM), que acumulará durante cinco años el 50% de los ingresos petroleros por encima de los nueve dólares el barril. "Estamos saliendo del túnel. Técnicamente ya salimos a flote y los próximos trimestres la tendencia se consolidará", declaró Jorge Giordani, ministro de Planificación y Desarrollo.
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