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Mudanza forzosa de un nido

Los bomberos desmontan el 'hogar' de unas cigüeñas para reparar un campanario

La pareja de cigüeñas sin nombre que llevaba varios años habitando sobre el campanario de la iglesia de San Esteban, en Fuenlabrada (167.500 habitantes), se quedó ayer sin casa. Por suerte, las aves estaban de viaje y no tuvieron que presenciar cómo los bomberos de la localidad desmontaban la estructura metálica de 200 kilos de peso que sostenía el nido.La mudanza fue obligatoria: el chapitel de la parroquia está tan dañado que podría derrumbarse. "La estructura interior es de madera y tiene varias vigas rotas", explicó el párroco de San Esteban, Rufo González. Las obras de reforma -que costea la Comunidad de Madrid con 30 millones de pesetas- estarán terminadas en el mes de diciembre, según el concejal de Medio Ambiente, José Sánchez. Así que, si se cumplen los plazos, la pareja de cigüeñas encontrará los cimientos del nido otra vez en su sitio cuando retorne a Fuenlabrada de su retiro migratorio.

"Tendrán que volver a reconstruir la casa, ramita a ramita; tienen mucho trabajo por delante", reflexionaba ayer una fuenlabreña de solera, Sagrario Moreno, mientras contemplaba el trajín de los bomberos, que tuvieron que demostrar su equilibrio y pericia trabajando a 30 metros de altura. Las cigüeñas son muy conocidas entre los vecinos de Fuenlabrada, que se movilizaron el año pasado para rescatar a una cría que se cayó del nido. "La envolvimos en una manta y la llevamos a Madrid", recuerda Sagrario. El párroco de la iglesia está deseando que acaben las obras y las aves vuelvan a construir su nido: "Es un signo de identidad de cualquier iglesia en España; embellecen e incluso dignifican la parroquia".

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