Miedo vasco

Los vascos viven en una situación de esquizofrenia: satisfechos por cómo les van las cosas en el terreno económico, personal y familiar y profundamente frustrados y pesimistas por la forma en que se desarrollan los acontecimientos políticos. No es extraño que un 15% de ellos, fundamentalmente jóvenes, se muestre dispuesto a marcharse del País Vasco si se le ofrecieran las mismas condiciones de vida en otro sitio, según se deduce del último Euskobarómetro, un sondeo de opinión que efectúa cada seis meses la Universidad del País Vasco.El diagnóstico, referente a los últimos seis meses, en los que ETA ha reactivado su estrategia terrorista, no puede ser más preocupante. No sólo por la frustración que revela en los ciudadanos vascos respecto de muchas de sus aspiraciones básicas, sino también por la imposibilidad que encuentran para darles salida en la actual situación política. Los vascos sienten ahora más miedo que hace algunos meses -el 70% confiesa su temor a participar en política o a hablar de ella en público-, y una mayoría percibe que la situación política es peor que antes de la tregua, de cuya ruptura la mitad culpa a ETA.

Ni la actuación del Gobierno de Ibarretxe ni la del Gobierno de Aznar merecen el beneplácito de los encuestados. Sólo el 41% considera positiva la actuación del primero, pero el descenso en esa valoración es considerable: 21 puntos menos que hace seis meses. El Gobierno central no sale mejor parado: el 51% (un 3% más que hace seis meses) suspende su gestión y siete de cada 10 juzgan equivocada su actuación durante la tregua de ETA. Ese drástico descenso en la valoración del Gobierno de Ibarretxe es un dato que apunta a una degradación acelerada de la confianza de los ciudadanos en su capacidad para resolver la actual situación. Pero tampoco confían en la estrategia del Gobierno central para salir del atolladero. Y lo más preocupante de todo: los vascos -ocho de cada 10- comienzan a percibir que las disputas y los desencuentros entre las fuerzas políticas contribuyen a crear tensión y divisiones en la sociedad.