Los Reyes llegan a Bolivia tras visitar el Amazonas

ENVIADO ESPECIALCon la llegada al aeropuerto boliviano de El Alto, cerca de la medianoche de ayer (hora española), los Reyes de España dieron comienzo a la segunda parte del viaje que realizan por Latinoamérica y que, tras la etapa brasileña, se centra ahora en Bolivia. Fueron recibidos por el presidente, Hugo Bánzer, y por el alcalde de El Alto, José Luis Paredes, que les entregó las llaves de la ciudad. Don Juan Carlos les transmitió los especiales lazos de amistad entre España y Bolivia en una visita considerada protocolaria. La Reina sufrió un leve percance al ser arañada por un animal en un hotel.

Posteriormente los Reyes se trasladaron en coche hasta la capital boliviana, La Paz. Hoy -aniversario de la independencia boliviana- está previsto que partan hacia Potosí, en la que, en una jornada de carácter marcadamente cultural, visitarán los lugares emblemáticos de esta ciudad, de la que salieron ingentes cantidades de plata con destino a Europa durante el imperio español, como la Casa de la Moneda, el convento de Santa Teresa y Cerro Chico, el lugar de las explotaciones mineras.La presencia de los Reyes en El Alto, localidad de 600.000 habitantes aledaña a La Paz y lugar dónde se encuentra el aeropuerto por donde se accede a ésta, había despertado gran expectación, en especial por la iniciativa adoptada por organizaciones de estudiantes y profesores, que reclaman la creación de una Universidad Autónoma. Los estudiantes habían anunciado que se atarían como "crucificados" a lo largo del recorrido por el que debía transcurrir la comitiva real. El canciller (ministro de Exteriores) boliviano, Javier Murillo de la Rocha, había pedido con anterioridad la suspensión de la protesta.

Don Juan Carlos y Doña Sofía llegaron a Bolivia procedentes de Manaos, en la selva amazónica brasileña, donde la Reina sufrió un percance al ser atacada por un animal. El incidente se produjo en el hotel Ariau Amazon Towers, a unos 60 kilómetros de la ciudad de Manaos. Doña Sofía subía unas escaleras para dirigirse al restaurante del hotel cuando se topó con un mono, algo relativamente frecuente en esta zona. La Reina hizo un gesto de acariciar la cabeza del mono, una hembra llamada Pipoca, pero el animal se asustó y comenzó a realizar movimientos bruscos arañando la pierna derecha de Doña Sofía. La Reina sufrió una pequeña herida que fue tratada en la enfermería del hotel. Según la prensa brasileña, los médicos de la comitiva real restaron importancia al incidente y aseguraron que Doña Sofía está inmunizada contra las enfermedades que se puedan transmitir en este tipo de percances como, por ejemplo, la rabia. La mona que atacó a la Reina se encuentra, al parecer, en estado de gestación, lo que podría explicar su violenta reacción a las caricias de la soberana española.

En el Amazonas brasileño, los Reyes navegaron el viernes por aguas del río Negro y visitaron a familias que habitan en la ribera del río, así como una aldea indígena. Don Juan Carlos se confesó muy feliz de estar en el lugar y añadió que "todos deberían conocer la Amazonía".