El Gobierno y la oposición llaman al PNV a volver al espíritu de Ermua para debilitar a ETA

El Gobierno y casi todos los partidos de la oposición clamaron ayer contra este nuevo atentado de ETA, condenaron su siniestra intencionalidad al hacerlo coincidir con el tercer aniversario del asesinato del edil del PP de Ermua Miguel Ángel Blanco y llamaron al PNV a recuperar aquel espíritu de unidad entre los partidos democráticos para debilitar al máximo a la banda terrorista. Algunas voces, como la de Julio Anguita (IU), demandaron más inteligencia para combatir a ETA no sólo militarmente. Y José Bono (PSOE) exigió que ningún ministro utilice ese lucha electoralmente.

El portavoz del Ejecutivo, Pío Cabanillas, calificó de "auténtica salvajada" el atentado. Tras la entrevista institucional entre José María Aznar y Alberto Ruiz Gallardón, Cabanillas aclaró: "[El atentado] No va a hacer cambiar lo que ya son posturas muy claras tanto del Gobierno como de la Comunidad Autónoma de Madrid". Y subrayó lo de Madrid porque, como recordó Ruiz Gallardón, es junto a Euskadi la comunidad más castigada por ETA.Cabanillas también salió al paso de una posible y macabra "conmemoración" de ETA con esta acción del asesinato de Miguel Ángel Blanco: "Si a la propia crueldad de estos atentados y lo que buscan se añade la consideración de una cierta simbología, lo único que hace es reafirmarnos a todos en el carácter incalificable de estas actuaciones".

El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, tras inaugurar una depuradora en Sestao (Vizcaya), se reafirmó en que así ETA lo único que logra es "fortalecer el espíritu de Ermua". En ese acto, el delegado del Gobierno en Euskadi, Enrique Villar, comentó que los etarras "no necesitan ningún aniversario, pero tienen tan mal gusto, son tan horteras y tan malvados que es posible que hayan querido aprovechar el dolor de España, de un partido y de unos padres y una hermana para 'celebrar' el asesinato".

El ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, arremetió contra quienes no respetan el derecho a la vida y no quieren progresar en paz "sin las coacciones que ejercen quienes no utilizan la cabeza ni el corazón".

Estas son otras reacciones de partidos políticos e instituciones.

- Partido Popular. El portavoz oficial del PP, Rafael Hernando, mostró su "condena rotunda" a esta "nueva salvajada de la mafia etarra", rememoró la muerte de Miguel Ángel Blanco y llamó a recuperar el espíritu de Ermua que "fortaleció la solidaridad entre los partidos y provocó el aislamiento de ETA y su entorno". Hernando aprovechó para lamentar "el debilitamiento" de ese espíritu "por algunos partidos vascos que volvieron a negociar con las fuerzas políticas que alientan a ETA" y les pidió que cambien esa actitud y "rompan con Estella con hechos".

- PSOE. Uno de los cuatro aspirantes a la Secretaría General de los socialistas, el presidente de la Comunidad de Castilla-La Mancha, José Bono, quiso establecer una nueva "línea divisoria" sobre las ya clásicas entre "violentos y no violentos, demócratas y no demócratas, nacionalistas y no nacionalistas" y apuntó que ahora habría que "empezar a distinguir entre quienes quieren acabar con ETA, con la ley en la mano, y quienes no quieren que ETA acabe". Eso sí, Bono apuntó que también "sería bueno que los intereses electorales de cualquier partido, o de cualquier persona, o de cualquier ministro, no se mezclen nunca ni voluntaria ni involuntariamente, ni siquiera en apariencia, con lo que debe ser la lucha de todos los demócratas".

Otra de las aspirantes a ese cargo, la eurodiputada Rosa Díez, instó a la dirección del PNV, "no a sus militantes", a que se reintegre con los partidos demócratas y deje de fortalecer a ETA. Una posición similar a la del líder del PSE, Nicolás Redondo, que también pidió al PNV que opte definitivamente entre "subordinarse"a los objetivos de ETA o "rebelarse" y retornar con los demócratas "donde estuvieron siempre". Argumentos que remachó el nuevo Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, al demandar al "nacionalismo antes llamado democrático y ahora convencional" que rompa con ETA y Estella y regrese al sentido común.

- Anguita e IU. El aún coordinador general de IU, Julio Anguita, incidió ayer que es necesario simultanear la condena a la violencia de ETA con la disposición al diálogo para abordar el problema vasco, que sí existe, y que según su criterio debería combatirse "con la inteligencia" y con "audacia" y "no sólo militarmente". El portavoz de IU en el Congreso, Felipe Alcaraz, reiteró la hipótesis del "aviso" de ETA ante el aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco y exigió que nadie utilice electoralmente el atentado, además de reclamar una nueva mesa de diálogo.

- La Generalitat, CiU y BNG. Desde la Generalitat de Cataluña se comunicó oficialmente la "enérgica condena" y se destacó que este atentado "tiene que fortalecer y cohesionar" a los que apuestan por la democracia. Por parte de CiU, Manel Silva, portavoz adjunto en el Congreso, hizo una llamada a la unidad y condenó la forma "solemne" que ETA tiene de "conmemorar su hazaña de hace tres años", en alusión a la ejecución de Blanco. Desde Uniò, José Antonio Duran Lleida, consejero de Gobernación, apostó por la unidad para ganar una "lucha larga y difícil". El Bloque Nacionalista Galego también hizo pública su "firme condena" y su "repulsa".

- Comisión Europea. El portavoz del Ejecutivo de la Comisión Europea, Jonathan Faull, leyó en Bruselas un comunicado en el que tildó esta acción como "una afrenta a los valores de democracia que rigen en la UE".

- Los sindicatos. Tanto desde Comisiones Obreras como desde UGT y USO se rechazó enérgicamente el atentado. Comisiones llamó a la movilización; USO pidió que se extremen las medidas de vigilancia y seguridad y el secretario general de UGT, Cándido Méndez, añadió que con estos actos ETA "marca la frontera" que "diferencia a los demócratas de quienes legitiman la violencia". UGT y CCOO de Madrid se reunieron en la tarde de ayer con representantes de PP, PSOE e IU para preparar una manifestación conjunta.

- Fundaciones y otros colectivos. La Coordinadora Gesto por la Paz del País Vasco, la Asociación Víctimas del Terrorismo, el Movimiento contra la Intolerancia y distintos portavoces del Foro de Ermua afirmaron su desprecio a la barbarie terrorista.