La ampliación de la M-501 arrasa 2.000 árboles del recién creado parque del Guadarrama

Unos 2.000 árboles, según la Consejería de Medio Ambiente (5.000, calculan los ecologistas) han sido talados para ampliar a cuatro carriles la actual M-501 a su paso por el Parque Regional del Guadarrama, la última zona natural que la Comunidad creó por ley en 1999. Medio Ambiente reconoce que las máquinas explanadoras se han adentrado en la zona de máxima protección del parque, pero que se han ajustado a la declaración de impacto. Los ecologistas lo niegan y hablan de "gravísimo atentado". La Consejería de Obras Públicas replica que todo se restaurará.

Declaración de impacto

La Asamblea de Madrid aprobó la ley que creaba el Parque Regional del Guadarrama en abril del año pasado. La nueva zona natural incluía un área de máxima protección ambiental que coincidía con las riberas que rodean el río Guadarrama. En ellas, según la nueva ley, se prohibían "todas aquellas actividades que puedan constituir focos importantes de emisión de contaminantes y que degraden los recursos naturales y/o culturales" y todas "aquellas actividades que puedan afectar a la flora y fauna silvestres" cuando se realicen sin la previa autorización de la Consejería de Medio Ambiente. A pesar de ello, en los últimos días las máquinas han acabado con unos 2.000 árboles de esta zona de máxima protección, la comprendida entre los términos de Villaviciosa de Odón y Brunete que sigue el curso del Guadarrama. Las excavadoras abren paso así a los dos nuevos carriles con que contará la M-501 entre ambas localidades.

Santiago Martín Barajas, portavoz de la asociación Ecologistas en Acción, manifestó ayer que la destrucción de estos árboles es "un auténtico atentado ecológico contra el medio ambiente madrileño". "La declaración de impacto obligaba a Obras Públicas a ceñirse al máximo al actual trazado de la carretera para reducir el impacto. Pero han hecho caso omiso y han deforestado más de 100 metros de bosque a lo largo de un kilómetro y medio".Los ecologistas calculan que en esta superficie habían arraigado cerca de 5.000 árboles, algunos de ellos centenarios. "Han acabado con pinos, fresnos y encinas de gran grosor. En esta zona nidifican también numerosas rapaces, a las que se les ha destruido el hábitat".

El director general del Medio Natural, Juan del Álamo, es menos drástico que los ecologistas en sus afirmaciones. Reduce el número de ejemplares talados a "unos 2.000, y no todos de gran porte". Según Del Álamo, "Obras Públicas tenía permiso para ampliar la carretera en unos 45 metros de anchura, y lo ha hecho definitivamente en sólo 41 metros, según los informes de los agentes ambientales. Es cierto que la obra es espectacular, pero la declaración de impacto les obliga a regenerar las zonas afectadas y lo harán".

El director general del Medio Natural recuerda que entre las medidas compensatorias que Obras Públicas tendrá que llevar a cabo se encuentra la reforestación de más de 500 metros de ancho a lo largo de las zonas afectadas.

Del Álamo reconoce también que la ampliación de la M-501 ha acabado con una zona recreativa que la Consejería de Medio Ambiente había levantado hace años en la zona. "La verdad es que el impacto es notable, pero hay que reconocer que no había otro sitio para meter el desdoblamiento por la zona. El parque regional fue aprobado con posterioridad a la declaración de impacto que regula la ampliación de la carretera, lo que ha influido, si se quiere, negativamente en el resultado final".

Por su parte, el consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, recordó ayer que se han cumplido todos los trámites legales y que se repondrán hasta cinco veces más ejemplares de los talados. "Si se han cortado por necesidades de la obra 2.000 árboles, se plantarán 10.000 sin problemas", indicó el consejero.

Pero Martín Barajas no se da por satisfecho. "Cortés nunca podrá reponer los árboles centenarios cortados, a no ser que encuentre un vivero donde tengan miles de estos ejemplares", afirma. El portavoz de los ecologistas mantiene que la zona afectada está incluida entre los denominados Lugares de Interés Comunitario (LIC), áreas bajo la tutela de la Unión Europea. "Acudiremos a Europa a denunciar estos hechos intolerables", anunció.