La deuda de las autonomías y el Banco de España MARTÍ CARNICER

El Banco de España acaba de publicar una serie revisada de la evolución del endeudamiento de las comunidades autónomas desde principios de 1995 hasta finales de 1999. La importancia de la revisión del método es su adecuación a las normas europeas y el cálculo de ratios que hasta la fecha eran objeto de disputas entre los diferentes comentaristas. A partir de este momento tendremos las cifras que nos ofrece el Banco de España para evaluar la posición de cada Gobierno autónomo, no sólo en sus valores absolutos, sino también en los niveles relativos.Los valores más importantes de la deuda viva a finales de diciembre de 1999 eran los que se reflejan en el cuadro que ilustra esta página. Debe recordarse que estas cifras hacen referencia tan sólo a la llamada deuda administrativa y en ningún caso incluyen el endeudamiento de las empresas públicas, que es el que se ha incrementado en mayor medida en los últimos años.

Los datos disponibles indican que la deuda acumulada hasta esta fecha se acerca a los seis billones de pesetas, siendo la comunidad con un nivel de endeudamiento más elevado Cataluña, que acumula por sí sola más de la cuarta parte de la deuda total.

Esta publicación también nos ofrece una serie comparativa de cómo ha evolucionado la deuda de las diferentes comunidades en los últimos años con relación al producto interior bruto (PIB) de cada territorio. Ésta es la cifraque, según el Banco de España, permite comparar mejor los datos entre las comunidades.

Las cifras nos permitn una clara observación de esta realidad: la medida del conjunto se mantiene entre el 6% y el 7% del PIB. A finales de 1999 representaba el 6,3%, mientras que el máximo se situó en 1997 con el 6,6% del PIB español. A efectos comparativos hay que recordar que la deuda del conjunto de las corporaciones locales es la mitad, 3,4% del PIB, a pesar de acumular mucha más historia que las autonomías.

-Navarra y el País Vasco, sobre todo Navarra, cuyo nivel al final de los años analizados es inferior al del inicio.

-El grupo formado por Cataluña, Andalucía y Galicia, que se mueve en un entorno similar, pasando del 8% al 9% en estos años. Es destacable que el orden interno entre la deuda de estos gobiernos ha cambiado totalmente. En el primer año la comunidad más endeudada de este grupo es Galicia; sin embargo, al final del año pasado el mayor nivel de deuda está en la Generalitat de Cataluña.

-Finalmente es Valencia la comunidad que ofrece una evolución más preocupante. Pasa de poco más del 6% del PIB en 1995 hasta el 9% en 1999. Es el territorio cuyo incremento relativo es más elevado. En cinco años ha duplicado su nivel absoluto de deuda.

Para obtener una radiografía más completa del significado de esta evolución hemos analizado cuál es la composición del crecimiento anual del volumen de deuda autonómico. Los resultados se ofrecen en el cuadro siguiente.

El primer dato destacable es la fuerte reducción del crecimiento del volumen nuevo de deuda generado. El crecimiento del pasivo de los años 1998 y 1999 es prácticamente la mitad del correspondiente a los dos años anteriores.

Debemos, pues, constatar un control importante por parte del conjunto de las comunidades con relación al recurso a la deuda como método de financiación de sus actuaciones. Sin embargo, este nivel de responsabilidad no se aprecia por igual en todos los gobiernos. En el cuadro siguiente hemos detallado la distribución del peso de cada comunidad en el total de la nueva deuda.

En 1996 la deuda generada por el Gobierno de la Generalitat catalana y el de la valenciana, era equivalente al 40% de la deuda total, con claro predominio de Cataluña sobre Valencia.

En los años 1997 y 1998 la participación de ambas comunidades asciende hasta el 50%. En el primero de los años la protagonista es Cataluña, pero en el segundo ya es Valencia quien toma el relevo.

Finalmente, en 1999 los mismos actores absorben por sí solos más del 80% del total de la deuda generada. Mientras que en otros territorios el volumen total de deuda disminuye incluso en valores absolutos, tanto en Cataluña como en Valencia el volmen de deuda adicional generado en 1999 es claramente superior al del año anterior. El aumento para Cataluña es del 89%, y para Valencia del 39%, mientras que el resto de las comunidades reducen el suyo en un 70%.

La nueva serie del Banco de España con relación a la deuda de las comunidades autónomas nos permite obtener algunas conclusiones:

-El peso de la deuda con relación al PIB, que había ido creciendo hasta el año 1997, ha experimentado una inflexión y en los últimos años ha descendido.

-Se observan diferencias importantes entre un grupo cuyo volumen de deuda se mantiene alrededor del 9% del PIB, frente a un 7% de media, y el resto. En este grupo se integran casi todas las comunidades del artículo 151 -falta Canarias-, lo cual indicaría que el modelo de financiación es más insuficiente para éstas que para las otras.

-No todas las comunidades han actuado con el mismo rigor. Es preciso que los gobiernos de Cataluña y Valencia mejoren su gestión financiera.

-Finalmente, debemos recordar que estos efectos se agravarían notablemente si considerásemos la deuda de las empresas públicas de cada gobierno, que no se publica de forma detallada.

Martí Carnicer es diputado del grupo Socialistes-Ciutadans pel Canvi.