ERC hace un guiño a CiU y presenta una proposición basada en el discurso de Pujol

Esquerra Republicana (ERC) hizo ayer un nuevo guiño a Convergència i Unió (CiU) y anunció que presentará una proposición no de ley en el Parlament que recoge el grueso de los argumentos expuestos por Jordi Pujol el pasado domingo, cuando sostuvo que Cataluña sufre un "expolio" por parte del resto de España. Esquerra tercia así en el debate entre CiU y el Partido Popular y ofrece a la coalición nacionalista una oportunidad para que se desmarque de los conservadores y explore una mayoría alternativa, aunque sea puntualmente.

Desde que la cúpula independentista decidió que tenía que apostar abiertamente por llegar a acuerdos con CiU, prácticamente no pasa un día sin que Esquerra formule alguna propuesta de colaboración. Ayer, no obstante, ERC pasó de las propuestas genéricas a la concreción y los diputados republicanos presentaron una iniciativa con el objetivo de alcanzar un primer acuerdo parlamentario, aunque sea puntual.Esquerra presentará en la comisión primera una proposición no de ley en defensa del autogobierno y de una financiación más justa que sigue prácticamente al pie de la letra el hilo argumental expuesto por Jordi Pujol el pasado domingo en un mitin de su partido. El texto entra de lleno en la polémica que mantiene la coalición nacionalista con el Gobierno del Partido Popular y, como explicó ayer el portavoz de ERC, Josep Huguet, pretende ser una "respuesta al intento latente" del Ejecutivo central de dar marcha atrás al desarrollo del Estado de las autonomías.

El pasado domingo, Pujol elevó el tono de su discurso y sostuvo que Cataluña sufre un "expolio" por parte del resto de España, advirtió que el Gobierno central ha tratado históricamente de "aguar" el contenido del Estatuto y exigió una mejora sustancial del sistema de financiación autonómico y la elevación del techo del autogobierno. En síntesis supone el contenido de la proposición que ayer presentó Esquerra.

El texto de la proposición emplaza al Parlament a "constatar que la Generalitat tiene pendientes de traspasos cerca de sesenta competencias" y a manifestar el rechazo a la "sistemática laminación de las competencias de la Generalitat incluidas en el Estatuto". Asimismo, reclama la "necesaria transparencia sobre los datos correspondientes a las balanzas fiscales entre las comunidades autónomas y el Estado" y, finalmente, "constata que los ciudadanos de Cataluña reciben menos de lo que les corresponde en población y aportan en impuestos más que su aportación al PIB del Estado".

La proposición de Esquerra evidencia la voluntad de llegar a un acuerdo con CiU al no exigir la reforma inmediata del Estatuto y limitarse a recordar que "no es un texto inamovible". Los independentistas darán la máxima prioridad a esta iniciativa y Huguet explicó ayer que si su tramitación se demora la introducirán por la vía de una interpelación análoga. A su juicio, todos los partidos parlamentarios, salvo el PP, deberían respaldar la proposición de ERC.

Tras la reunión del grupo parlamentario, Huguet volvió a emplazar a CiU a escoger entre proseguir la colaboración con el PP y estudiar posibilidades de acuerdos con Esquerra y le pidió que resuelva pronto el "dilema importante". No obstante, Huguet -que en su partido representa actualmente las posiciones más reacias al acuerdo con CiU- subrayó que cualquier aproximación debe ir precedida de un "giro de 180 grados en la política de la coalición nacionalista". En contra de lo expresado reiteradamente por Carod, Huguet consideró "incompatible" que CiU selle un pacto nacionalista en Cataluña y mantenga su colaboración con el PP en Madrid.

Triángulo

Al mismo tiempo que Esquerra Republicana trataba de arrastrar a CiU hacia sus posiciones, el PP hacía lo propio desde el otro vértice del triángulo. El presidente del PP de Cataluña y jefe de su grupo parlamentario, Alberto Fernández Díaz, pidió a Convergència que "no radicalice su mensaje" como consecuencia de la "inseguridad".

Fernández Díaz sostuvo que CiU ha iniciado en los últimos días una "huida hacia adelante de imprevisibles consecuencias". A su juicio, ello se debe a tres factores: que la coalición nacionalista "es consciente de que ha perdido protagonismo político", que está inmersa en una "grave crisis" con motivo de la sucesión de Jordi Pujol y que busca "cortinas de humo para esconder los verdaderos problemas de la sociedad catalana".

El líder conservador coincidió con Huguet al descartar la posibilidad de que CiU pacte con Esquerra en Cataluña y colabore con el PP en Madrid. "CiU es muy libre de estrellarse por sí sola", añadió, en referencia a un eventual pacto nacionalista.