Sanidad negocia con los cirujanos del corazón un plan de choque contra las listas de espera

Los cirujanos cardiovasculares quieren resolver cuanto antes los graves problemas derivados de sus largas listas de espera. Para lograrlo, han iniciado una negociación con el Ministerio de Sanidad en la que, además de expresar su voluntad de colaborar con la solución de las listas de espera, piden más recursos humanos y materiales. Ayer hubo ya una primera reunión en el departamento con el asesor de la ministra Ramiro Rivera. Muchos de los cirujanos han expuesto incluso su disponibilidad a operar gratis por las tardes durante dos meses como medida de choque.

La denuncia realizada por varios médicos en los medios de comunicación de que los pacientes mueren estando en lista de espera es "una situación no deseada" que ha movilizado a los especialistas. Ayer por la mañana, varios miembros de la Sociedad Española de Cirugía Cardiovascular mantuvieron una reunión en Madrid con Ramiro Rivera y los dos principales responsables del Insalud, el presidente, Rubén Moreno y el director general, José María Bonet. En dicho encuentro, se hizo entrega de un escrito firmado por 19 jefes de servicios en el que se expone la situación y se piden más recursos.

El escrito, estructurado en cinco puntos, expone en líneas generales lo siguiente:

1º La demanda en cirugía cardiovascular sobrepasa a la oferta desde hace muchos años, lo que ha sido denunciado desde hace veinte años.

2º La demanda ha ido en aumento debido al envejecimiento de la población y a la mejora de los métodos diagnósticos, entre otros.

3º La patología de corazón encierra un consustancial peligro potencial de muerte súbita en lista de espera a pesar de que se dé prioridad a los casos más graves.

4º La solución pasa por reestructurar los servicios y una mayor provisión de recusos humanos y materiales.

5º En ningún caso, las medidas de solución pueden deteriorar los procesos.

El presidente de la Sociedad Española de Cirugía Cardiovascular, Teodoro Moreno, firmante del escrito junto al vicepresidente, José Luis Pomar, señaló que la actitud de los tres altos cargos de Sanidad fue la de tomar nota. Pero también añadió que, respecto al territorio administrado directamente por el Insalud (diez comunidades autónomas), los máximos responsables de dicho instituto indicaron su voluntad de arreglar la cuestión cuanto antes. "Deseamos que el resto de las comunidades autónomas con la gestión sanitaria transferida tomen la misma actitud", añadió Teodoro Moreno.

Reunión en Barcelona

La reunión de ayer tuvo su precedente en Barcelona, donde este fin de semana se vieron 17 jefes de cirugía cardiovascular para estudiar un programa informático aplicable a cardiología. Allí, los jefes de cirugía cardiovascular (hay 46 en toda España, de los cuales una treintena trabaja en la sanidad pública) acordaron verbalmente operar incluso gratis como plan de choque. Estos especialistas decidieron no pedir dinero para ellos, sino "más medios" para los hospitales.

Una llamada del también cirujano cardiovascular Ramiro Rivera, ahora principal asesor de la ministra de Sanidad, Celia Villalobos, provocó el debate "durante más de cuatro horas" sobre este asunto. Todos los presentes coincidieron en señalar que era necesario evitar aparecer ante la opinión pública "como peseteros", aseguran las fuentes informantes, por lo que decidieron ponerse a disposición del Ministerio de Sanidad para, "si hace falta, ponerse a operar por la tarde".

Teodoro Moreno señaló que el ofrecimiento de operar gratis no es ni puede ser una oferta general. "No podemos hablar por los 200 cirujanos que hay en España y, además, es de justicia que el que trabaje más sea recompensado por ello. Otra cosa es que alguno haga tal ofrecimiento".

"Naturalmente que lo haríamos gratis si es necesario. Porque estamos dispuestos a arreglar la situación y no queremos hablar de dinero. No pretendemos transmitir a la sociedad una imagen equivocada; queremos que quede clara nuestra voluntad absoluta de solucionarlo", dijo ayer el cirujano Carlos Infante, jefe del servicio del Hospital Virgen de la Macarena de Sevilla, presente también en la reunión de Barcelona.

A raíz de las denuncias hechas por los cirujanos cardiovasculares, este periódico ha sabido que más de 2.200 pacientes de corazón están en lista de espera y que los plazos transcurridos antes de ser operados son mucho más largos que lo que arrojan los escasos datos oficiales.