Montoro desestima los "quejidos" sobre los agravios comparativos

Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, apostó anoche en Madrid de forma inapelable por un modelo estable de financiación autonómica que ponga fin a las reivindicaciones territoriales.En una conferencia dictada en el Club Siglo XXI, Montoro afirmó que el traspaso de competencias a las comunidades autónomas "está concluyendo" y abogó por "un modelo de financiación autonómica estable que articule de manera satisfactoria las necesidades de todas las administraciones".

El ministro de Hacienda invocó la creciente internacionalización de la economía, destacó el carácter abierto e integrado de la realidad económica española y sugirió que, cuando el mundo entero persigue los beneficios derivados de la implantación de las nuevas tecnologías, "resultan rancias y anacrónicas las peleas provincianas, las incansables reivindicaciones autonómicas, el aburrido sonsonete de los privilegios diferenciales y los quejidos de los agravios comparativos".

Discurso del pasado

Montoro insistió en la necesidad de cerrar definitivamente el debate sobre la dotación financiera de las diversas administraciones autonómicas con una reflexión de corte netamente popular: "Poco atractivo tiene esta pesada insistencia por un discurso del pasado para una sociedad, como la española, que está mirando al futuro".

Sin embargo, el ministro de Hacienda eludió trazar las líneas maestras de un posible modelo definitivo para garantizar la financiación de los servicios que prestan los gobierno regionales. Apenas insinuó que se debe reforzar la corresponsabilidad fiscal de las distintas comunidades autónomas sin perder de vista la necesidad de "garantizar la solidaridad entre los ciudadanos y la irrenunciable función resdistributiva de las políticas del Estado y de las instituciones estatales de protección social".