Un concejal del PP veta por ilegal un mercadillo de colombianos en Usera

"Yo quiero vender sin miedo, sin la zozobra constante de que venga la policía y nos quite nuestras cosas". Cristina López lleva cinco años acudiendo cada domingo al parque David González Rubio, conocido entre los colombianos como parque del Doce de Octubre, en el distrito de Usera. Allí, junto a unos 50 comerciantes, vende los platos típicos de su país a unos 2.000 compatriotas que cada fin de semana abarrotan la zona.Pero ni Cristina ni sus compañeros viven en paz. Los persigue el temor de que en cualquier momento el negocio se les venga abajo y el esfuerzo que han hecho durante cinco años no sirva para nada. El edil de Usera, Carlos Izquierdo, rechaza por ilegal el rastrillo y asegura que ha recibido denuncias vecinales en contra del mercadillo del parque.

Los comerciantes, sin embargo, se declaran "dispuestos a luchar". "Si tenemos que pagar impuestos como todo el mundo, lo haremos; también estamos listos para cumplir los requisitos que nos impongan. Lo que no puede ser es que no nos dejen estar aquí", dice Johny Suárez, otro comerciante del sector.

En el parque del Doce de Octubre sólo se respira olor a empanadas, tamales y buñuelos, toda comida típica colombiana. Entre música salsa y vallenata, los colombianos, en su mayoría residentes en Usera, aprovechan el domingo para establecer contactos de trabajo o simplemente para hablar de la situación de su país.

"Nosotros proponemos que las leyes se adecuen a la nueva realidad que hay en Madrid en cuanto a inmigración. De alguna manera estamos tratando de que dejen trabajar a esta gente", dice Yolanda Villavicencio, de la ONG Aesco. (América-España, Solidaridad y Cooperación). Eso mismo piensa el diputado socialista Francisco Contreras, portavoz de inmigración: "Cuando hay fenómenos sociales como éste, la Administración debe sentarse a hablar para encontrar una solución y sacar lo positivo. Pero tiene que haber buena voluntad política. Y hasta el día de hoy el concejal no la ha demostrado. Pero no basta con medidas puntuales, se requiere un plan global".

Contrario a lo que argumenta el concejal Carlos Izquierdo, Yolanda Villavicencio asegura que los comerciantes han contratado a dos personas que se encargan de limpiar el parque. Además, dice, han iniciado conversaciones con las asociaciones vecinales del sector para llegar a un acuerdo. "Aunque no notamos rechazo", comenta.

Como alternativa al parque Doce de Octubre, un grupo de comerciantes propuso irse a la Casa de Campo, pero la mayoría ha optado por quedarse y pedir una "concesión administrativa". En próximos días, los colombianos se reunirán con los colectivos de ecuatorianos y peruanos que se juntan los fines de semana en el Parque del Oeste y en la Chopera del Retiro para elaborar una propuesta conjunta y presentarla a las administraciones.