Puig de la Bellacasa anuncia "continuidad" en Bellas Artes, y Amorós, más proyección del teatro y la música

El Ministerio de Cultura renovó ayer otros dos nuevos cargos. El valenciano Andrés Amorós, de 59 años, fue nombrado director general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (Inaem). Sustituye en el cargo a Andrés Ruiz Tarazona. Y Joaquín Puig de la Bellacasa, madrileño de 56 años, es el nuevo director general de Bellas Artes, en sustitución de Benigno Pendás. Ambos tomarán posesión del cargo la semana que viene y aún no tienen decidida la composición de sus equipos. Joaquín Puig de la Bellacasa dijo ayer que su nuevo destino es el de "mayor responsabilidad" que ha ejercido en sus 30 años como funcionario y que estará presidido por "la continuidad". Puig de la Bellacasa ha desempeñado cargos en los ministerios de Asuntos Exteriores, Defensa y Cultura. Desde 1996 era director de Cultura en el Instituto Cervantes.

El nuevo director general de Bellas Artes dijo ayer que centrará su interés en "mejorar el patrimonio español, uno de los más importantes del mundo, y transmitirlo en las mejores condiciones a las generaciones futuras". Se mostró prudente sobre las ampliaciones de los museos del Prado y Reina Sofía, pero añadió que "todo lo que se haga por el Prado será poco".

Andrés Amorós, catedrático, crítico teatral y taurino, ha sido durante seis meses director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC), una actividad que deja "con tristeza", dijo ayer a Efe. En su nuevo destino tiene muy claro que el protagonismo "debe ser de los creadores, no de los políticos y los gestores". Sin embargo, se mostró convencido de que desde las administraciones se puede "favorecer" el desarrollo de las artes y, en concreto, de las escénicas. "Sobre todo, podemos contribuir a que lleguen al mayor número posible de ciudadanos, porque la cultura es calidad de vida".

Amorós dijo sentirse discípulo de los maestros de la generación del 14: Azorín, Ortega, Marañón, Pérez de Ayala y Miró. Tomará posesión la próxima semana, cuando regrese de Sevilla, adonde viajará con la CNTC, que estrena en esa ciudad Maravillas de Cervantes, uno de sus últimos espectáculos, dirigido por Joan Font. Hombre de teatro, Amorós reconoce sus carencias en cuestiones musicales, aunque es un aficionado de siempre: "Nada me gustaría más que ver un día el Teatro Real lleno de jóvenes".