Las arcas de Alicante están "más saneadas que nunca", según Alperi

El nivel de endeudamiento financiero del Ayuntamiento de Alicante enfrentó ayer, una vez más, a los partidos de izquierda, en la oposición, con el equipo de gobierno, en manos del PP. Mientras los primeros levantaron la voz de alarma ante una situación que consideran "muy delicada y preocupante" -la institución debe más de 20.000 millones de pesetas a bancos y cajas de ahorro-, el alcalde, Luis Díaz Alperi, enfatizó que las arcas locales están "más saneadas que nunca", y se felicitó por ello.

La propuesta de suscribir un nuevo préstamo financiero por importe de 1.836 millones de pesetas para poder hacer frente a las inversiones previstas en los presupuestos, que fue aprobado finalmente con los votos del PP, desató ayer un agrio debate en el pleno del Ayuntamiento de Alicante. La oposición calificó de "peligroso" el nivel de endeudamiento, cercano al máximo legal que permite el Ministerio de Economía y Hacienda a los ayuntamientos, a lo que el PP replicó con la exposición de una situación casi idílica de las arcas públicas, e invitando a los socialistas a comprobar "en la calle" el resultado de las inversiones.Para el alcalde, Luis Díaz Alperi, la preocupación de EU y PSPV por la situación financiera de la institución es "excesiva". Pese a reconocer la deuda, el primer edil señaló que el Ayuntamiento que preside está hoy "más saneado que nunca", y felicitó por ello a su concejal de Hacienda, María Teresa Revenga, que se defendió de los ataques comparando su gestión con la de anteriores gobiernos socialistas.

El primero en abrir fuego en el debate económico fue el portavoz socialista, José Antonio Pina, que destacó el aumento en un 318% en la deuda financiera de Alicante registrado durante los primeros cinco años de gobierno popular. Pina advirtió de que el ciclo económico boyante que atraviesa hoy la ciudad "no durará eternamente", e instó al PP a captar fondos de administraciones superiores. Para el PSPV la deuda financiera actual, que se eleva exactamente a 20.678 millones de pesetas, "no se ve por ningún sitio", lo que atribuyó a las escasas inversiones y al aumento "vertiginoso" que experimentan los gastos corrientes ejercicio tras ejercicio. "Cuando se contraiga más deuda para cumplir los presupuestos rozaremos el límite legal y entraremos en situación peligrosa", sentenció.

La concejal de Hacienda intentó poner paños calientes a la situación, asegurando que dispone de "otras fórmulas" para financiar inversiones, al margen de los préstamos bancarios. "Eso demuestra que el Ayuntamiento está saneado", dijo, para acto seguido dar un salto en el tiempo y referirse a la gestión económica de los anteriores gobiernos socialistas.

Según Revenga, el PSPV abandonó el poder local con una deuda financiera de 10.000 millones de pesetas (6.502 según los socialistas), sujeta a unos intereses del 9% y hasta el 15%. "La situación era entonces tremendamente peligrosa y obligaba a realizar operaciones de tesorería para asumir el gasto corriente, pero ahora es muy diferente, los intereses no sobrepasan el 4% y los ingresos son superiores a los presupuestos".

Pago a proveedores

Tanto María Teresa Revenga como el alcalde se esforzaron en transmitir una situación de normalidad en las arcas públicas locales, y pusieron como ejemplo de ello el pago a proveedores, que cobran en el plazo máximo de dos meses "cuando antes tenían que esperar más de 10 meses y en ocasiones hasta un año y medio".

La intervención del portavoz de EU, José Luis Romero, se centró más en las inversiones prioritarias que en la deuda real. Para este edil, el PP se olvida de invertir en barrios obreros y destina la mayor parte del esfuerzo financiero a zonas residenciales de la costa. EU se opone no sólo a endeudar más las arcas locales, sino a que esas otras fórmulas de alcanzar liquidez de las que habló la concejal de Hacienda, sin especificarlas, se traduzcan en venta de suelo público.

Para el PP, las críticas de la oposición por el nivel de endeudamiento se deben a que sólo conoce "una parte" de la situación real. "Yo lo conozco todo", concluyó la concejal María Teresa Revenga.